El ICD cierra el Guillermo Molina este domingo porque no tiene quien abra las puertas

Este domingo, 2 de julio, la piscina del Guillermo Molina permanecerá cerrada y asi lo anuncia el Instituto Ceutí de Deportes (ICD) a través de un cartel en el tablón de anuncios del complejo deportivo desde la mañana de este viernes. Lo que no se señala es que si la piscina no abre es porque no habrá quien controle el acceso a la misma, ya que el contrato para este servicio finaliza este sábado y la adjudicataria del mismo, Arasti Barca, no está dispuesta a seguir prestándolo si la Ciudad Autónoma no se lo pide por escrito.

Después de cinco años prestando el servicio de monitores y socorristas en las piscinas sin contrato porque la administración no ha sacado un nuevo pliego, y de que ahora el Gobierno se niegue a pagarle el servicio si la empresa no interpone una demanda en el juzgado, Arasti Barca no quiere tropezar dos veces en la misma piedra. Por eso, ha pedido al ICD que le entregue un escrito en el que solicite formalmente que se preste el servicio hasta que haya una nueva licitación y, por tanto, un nuevo adjudicatario. Un documento que permitiría a la empresa poder reclamar el pago del servicio, como señala Miguel Arasti, responsable de la compañía.

Sin embargo, desde el ICD no han solicitado formalmente que se siga dando el servicio y desde Arasti Barca han decidido dar vacaciones a los empleados que se encuentran dando el servicio de control de acceso a los polideportivos. Una situación ante la que al ICD no le ha quedado más remedio que cerrar la piscina este domingo. Pero el Guillermo Molina no es el único complejo deportivo afectado, ya que Arasti Barca se encontraba prestando el servicio en todos los polideportivos de la ciudad. Por eso, a partir del lunes, la cuestión estará en ver cómo el ICD hace frente a la gestión de este servicio. Lo que al parecer podría hacerse con personal de mantenimiento del propio organismo.