Hachuel: “Ceuta no puede convertirse en un mega-campamento”
Asalto a la valla
El consejero de Gobernación y portavoz del Gobierno, Jacob Hachuel, ha respondido este mediodía a las preguntas de los periodistas tras el Consejo de Gobierno y el tema más recurrente fue, como no podía ser de otra manera, la postura de la Ciudad acerca del último asalto masivo a la valla fronteriza que separa Ceuta de Marruecos. En este sentido, Hachuel manifestó que “la Ciudad no puede estar a espaldas de lo que está ocurriendo. El Gobierno ve este suceso con mucha preocupación. Estamos muy preocupados porque Ceuta no puede convertirse en un mega-campamento”. El portavoz considera que este episodio ha marcado un antes y un después en la forma de pasar la valla y por ello, “hay que estudiar con muchísimo interés cómo evitar futuros intentos de este tipo”.
Asimismo, el portavoz quiso manifestar su indignación por cómo se sucedieron los hechos: “La forma de forzar la entrada de los que el jueves la forzaron, ha supuesto un antes y un después. No solo han superado las concertinas, que lo hicieron, sino que ya han utilizado una estrategia que ha demostrado una organización perfectamente definida (han entrado por seis puntos a la vez), utilizando cizallas y sierras eléctricas a pilas”.
Hachuel ve una organización detrás de este ataque y esto es motivo de preocupación: “Para entrar como entraron hay que estar muy bien preparado y muy bien organizado y además utilizando material agresivo contra las fuerzas de seguridad como es el caso de sprays utilizados a modo de lanzallamas, cal viva, heces, etc”.
El consejero se refirió a los guardias civiles heridos, con quemaduras químicas: “e incluso hay alguno con la posibilidad de perder un ojo”. Esta entrada masiva, recordó Hachuel, obligó a cancelar todas las intervenciones quirúrgicas en el Hospital, precisamente para atender a los guardias civiles y a los inmigrantes.
“Esperamos que el Gobierno tome las medidas necesarias”.
Por todo ello, Jacob Hachuel lanzó un mensaje al Gobierno de la nación: “Esperamos que el Gobierno de la Nación tome las medidas para que esto no vuelva a ocurrir. Y en cualquier caso quiero reiterar que el Gobierno, a través de la Delegación del Gobierno nos tiene a su disposición, en todo lo que podamos ayudar”.
Hachuel recalcó que la Ciudad no está enfrentada con Delegación. Muy al contrario, mantuvieron una línea de comunicación en todo momento.
Asimismo el consejero dio cuenta de la inestimable labor que llevó a cabo la Policía Local, que se desplazó a ayudar al resto de fuerzas de seguridad. En concreto, ayudaron a localizar y registrar a todos los que habían llegado para llevarlos al CETI.
Eso sí, la respuesta y la solución definitiva a este problema le corresponde darla al Gobierno de la Nación, el Ministerio del Interior, no a la Ciudad, que no tiene competencias en este campo. Hachuel explicó que le pidió a Fernando Grande Marlaska que le explicase en qué punto estaba el estudio de la retirada de las concertinas y que “antes de retirar lo que hay, se tiene que colocar un elemento disuasorio alternativo”.
Por último, Jacob Hachuel desmintió las palabras del ministro del Interior en lo relativo a la “superpoblación” de los centros de internamiento. “El CETI ya estaba ocupado al 100% porque solo caben unas 500 personas. Si ya estaba sobrepasado con anterioridad, y le metes 602 más, ya me diréis si no está sobrepasado. En este momento hay 1.200 inmigrantes en el CETI y aledaños, porque hay 200 en tiendas de campaña. Dentro del CETI hay 1.000, en donde caben 500”.