Encuentran en El Tarajal un delfín mordido por un tiburón en un estado lamentable
SUCESOS
Los mares continúan mostrando las evidencias perniciosas del efecto humano sobre la naturaleza. En Ceuta el testimonio más evidente lo constituye la playa del Tarajal, colindante con el perímetro fronterizo donde la labor del porteo genera una ingente cantidad de residuos inorgánicos, casi siempre.
Si el pasado día 12 la ‘Asociación Ceuta sin Plástico’ conseguía llenar cien sacos a cuenta de plásticos, cartones y otros desechos, al día siguiente un vecino encontraba el cadáver de un delfín con la cola cortada. Los veterinarios a cargo del examen del animal comentan que tras pasar bastante tiempo a flote recibió un considerable bocado por parte de un escualo que lo seccionó en dos mitades.
El ejemplar se encontraba en un avanzado estado de descomposición. Por lo tanto tras la recogida por parte de Athisa (Andaluza de Tratamientos de Higiene) concesionaria de este servicio que lo encontró entre las toneladas de basura y desperdicios que anegan la playa, pasará directamente al pudridero sin necesidad de que se le practique la necrosia.
Si el año pasado se cerraba con treinta varamientos, 2020 va camino de romper el récord y ya van tres ejemplares encontrados en lo que va de enero. En alguno de los casos se tratan de ejemplares enfermos o que han quedado rezagados y pierden la estela de la manada quedando desorientados en alta mar, pero los casos más flagrantes los constituyen aquellos delfines que son mutilados por los pescadores, en general en aguas de Marruecos. Al quedar atrapados en las redes de captura son cortados y mueren desangrados en una agonía interminable.
El año pasado la dimensión del problema alcanzó tal magnitud que provocó la convocatoria de una cumbre bilateral que se celebró en el país vecino y que acordó catalogar como crímenes los ataques contra cetáceos tales como delfines, ballenas y especies marinas como las tortugas bobas.
En Ceuta el CECAM (Centro de Estudios y Conservación de Animales Marinos) se encarga de recuperar los ejemplares que consiguen escapar de la masacre persecutoria.
