ALGO MÁS QUE PALABRAS
Abandonarse al dolor sin resistir; es nuestra mayor debilidad
El comienzo de la visita a Ceuta del presidente de la Junta de Andalucía, tuvo como primer acto, según me han contado, algo inusual. Parece que lo primero que hizo Juan Manuel Moreno, no fue estrechar la mano de Juan Vivas, que le estaba esperando en el helipuerto, sino reunirse con el consejero delegado de Helity, Antonio Barranco, buen empresario donde los haya. De la mano de Juan Bravo, recorrió los hangares de la compañía de helicópteros, tomando contacto con la empresa y ya después, saludó a Juan Vivas. Posiblemente o, mejor, lógicamente, hubiera debido ser el presidente de Ceuta quien hubiese acompañado al presidente andaluz en ese inicial recorrido para conocer a una de nuestras mejores empresas, pero… Yo, que ya estoy libre de hipocresías políticas, puedo pensar en cómo el hoy consejero andaluz y antes diputado ceutí le ha devuelto más de un agravio a Vivas, eso sí, con la sonrisa profiden disimulada por la mascarilla, que nunca debe faltar cuando se trata de transmitir lo que no se siente. En todo caso, la corrección del presidente andaluz fue exquisita.
El encuentro de ambos presidentes fue por los derroteros esperados, de compromisos políticos difícilmente practicables, por cuanto el estado de las autonomías penaliza las confederaciones entre ellas. No obstante, me parece pertinente recordar algunas cosas al respecto.
Ceuta sigue estando vinculada a Andalucía quiera o no quiera y hay ejemplos varios. Nuestra justicia, pilar básico del Estado, sigue siendo la justicia gaditana y que en Ceuta tiene una sección de la Audiencia de Cádiz como máximo órgano jurisdiccional con sede en nuestra ciudad. O sea, por no tener no tenemos ni Audiencia Provincial propia, a pesar de que nuestro Estatuto de Autonomía nos equipara a una provincia. Naturalmente, nuestro Tribunal Superior es el de Sevilla, porque al no ser Ceuta una Comunidad Autónoma, su estructura judicial no puede culminar con un Tribunal Superior propio.
En materia de educación superior, no es que no seamos competentes, es que no tenemos sede universitaria propia, al disponer sólo de una sucursal de la universidad de Granada.
Ni siquiera el Vaticano considera la necesidad de establecer una diócesis única para Ceuta, compartiendo obispado con nuestra querida Cádiz. Y, desde luego y para no dilatarme mucho, nuestra salida natural es Algeciras, si lo hacemos por barco, o Málaga si decidimos utilizar el helicóptero. Y de hospitales alternativos al nuestro ya ni hablo, porque va en función de la necesidad que se plantee en cada caso.
Cádiz, Granada, Sevilla, Málaga, Córdoba… Ligados indefectiblemente a Andalucía, con o sin acuerdo de presidentes o convenios aprobados por los parlamentos de Ceuta y Andalucía.
Andalucía tiene sus problemas y Ceuta los suyos y como vecinos y miembros de la misma nación cooperan para atender las necesidades de cualquier ciudadano aquí o allá y, si se establecen programas de ayuda mutua más allá de esto, pues mejor todavía. Pero Ceuta sólo tiene un asidero al que agarrarse de verdad y ese es el Estado, cuyo representante más inmediato es el Presidente del Gobierno. Y por ahora y, creo que es mi deber decirlo, Sánchez no está sosteniendo a Ceuta con la fuerza necesaria. Ceuta pudo ser Andalucía cuando se constituyó el ente preautonómico, pero los intereses de la izquierda prevalecieron sobre el patriotismo y el sentido común. Los votos de los dos diputados y de los cuatro senadores de Ceuta y Melilla, hacían sumar al centro-derecha más que a las izquierdas en la primera asamblea andaluza constituyente y, la extinta UCD, para no provocar más tensiones, cedió la presidencia de ese primer ente preautonómico andaluz al PSOE, aunque para ello tuvo que excluir a los representantes de Ceuta y de Melilla en la citada elección y condenar a las dos ciudades norteafricanas a la soledad durante mucho tiempo.
Hoy, no superadas aún las secuelas de aquellas decisiones, seguimos debatiéndonos como ciudad y como país, sobre cuál debe ser nuestro legítimo lugar en nuestro mundo, con IVA o con IPSI, dentro o fuera de la Unión Aduanera, con Autonomía política o sólo administrativa como hasta ahora y con una voz fuerte, clara y propia en Madrid, como Teruel, Canarias o Cantabria o federados con los grandes partidos de ámbito estatal. Vivas ha defendido con inteligencia los intereses de Ceuta hasta ahora y, estoy seguro de que lo seguirá haciendo mientras sea nuestro presidente, pero llegan los tiempos de la redefinición de muchas cosas y no hay que atragantarse, sólo ser conscientes de que estos tiempos son revueltos y complicados. Juanma Moreno ha sido y, probablemente seguirá siendo durante bastante tiempo, ese revulsivo que ansiaban los andaluces.
También te puede interesar
ALGO MÁS QUE PALABRAS
Abandonarse al dolor sin resistir; es nuestra mayor debilidad
ALGO MÁS QUE PALABRAS
Un mundo sin calor de hogar; es como un cuerpo sin alma
Lo último
San Daniel, patrón de Ceuta
La lluvia impide que San Daniel, patrón de Ceuta, pueda procesionar por sus calles