Queda mucho camino por recorrer
La violencia machista un día sí y otro también le cuesta la vida a mujeres. Raro es el día que no tenemos que lamentar en España la muerte de una mujer a manos de un cobarde que se convierte en asesino para acabar con la vida de la que él considera “su mujer”. Las personas no somos de nadie, cada una/o es dueño/a de sí misma/o, eso es lo primero que deberían de enseñarnos.
Si hablamos a nivel mundial no es que el tema mejore, más bien todo lo contrario, ya que hay países que no respetan para nada los derechos y libertades de las mujeres, incluso en algunos países las lapidan por lo más mínimo.
Las religiones, en todo lo relacionado con los derechos y libertades de las mujeres, no ayudan, más bien, en la mayoría de los casos, lo empeoran y bastante. Es más, en mi opinión, tienen buena parte de responsabilidad ya que las mujeres no salen bien paradas.
Se debería hacer mucho más para que la educación que se imparte en los colegios, y principalmente también en el ámbito familiar, fuese dirigida a concienciar a los niños de que las niñas tienen los mismos derechos y libertades que ellos. Y por supuesto, educar a las niñas para que sean conscientes de que tienen los mismos derechos y libertades que los niños. Esto es extensible a cualquier diversidad sexual, ya que todas deben de ser respetadas.
Otra cosa en la que avanzamos muy lentamente, es lo relativo a la libertad sexual de cada una/o, la cual está por encima de la moralidad y tonterías de esas. La persona que nace o elige ser homosexual, bisexual, heterosexual…, lo es porque quiere y le da la gana. Y los demás no somos nadie para decirle absolutamente nada, ya que cada uno es libre de elegir su condición sexual sin tener que soportar las críticas, violencia, discriminación… de una sociedad que muchas veces se comporta de forma injusta e hipócrita con las personas que consideran que no son iguales que ellos.
En algunas cosas se ha avanzado algo, pero la realidad habla por sí sola, aún a día de hoy miles y miles de mujeres son discriminadas en el mundo por el mero hecho de haber nacido mujer. También existe todavía, en unos países más que en otros, discriminación y rechazo hacia homosexuales, transexuales…, en algunos lugares incluso son perseguidos y encarcelados. La violencia y la homofobia son brutales, en la mayoría de los casos viene por temas de religión.
Tampoco hay que olvidarse que en pleno siglo XXI miles de mujeres son obligadas a prostituirse bajo amenaza de muerte. La “trata de blanca” se aprovecha de la miseria y falta de recursos de muchas mujeres para esclavizarlas y hacer de ellas un negocio muy lucrativo.
Para terminar, decir que soy de los que piensa que las mujeres son tanto o más válidas que los hombres en todos los aspectos. Y que la religión y el patriarcado está claro que ha hecho, y sigue haciendo, mucho daño a las libertades de las mujeres, ya que hace años, por no dejarlas, no las dejaban ni de estudiar, cosa que sigue ocurriendo en muchos países del mundo. Hoy por hoy, aunque queda mucho camino por recorrer, las universidades están llenas de mujeres en los países que las dejan de estudiar, que por desgracia, no son todos.
