La ciudad de Bari, un destino apasionante

No hay fechas para viajar. Cualquier momento es bueno para conocer lugares de los que alguna vez se ha oído hablar pero nunca se han visitado. Italia es un destino apasionante. Desplazarse con la imaginación al sur del país para recalar en la ciudad de Bari resulta estimulante. En sus calles, el visitante puede encontrar a mujeres elaborando pasta fresca, disfrutando del casco histórico de Bari Vecchia para llegar a la Strada della Pasta o Via dell’Arco Basso.

Las mujeres encargadas de preparar la pasta, habitualmente de avanzada edad, ofrecen, en algunos casos, la posibilidad al turista de comer en sus propias casas los platos típicos de la zona a modo de restaurante doméstico.

Más allá del casco histórico, el visitante encontrará el castillo medieval Svevo, una fortaleza normanda del siglo XII y uno de los ejemplos de la arquitectura románica más importante de toda Italia.

Otro de los monumentos cuya visita es inexcusable es la Basílica de San Nicolás, que alberga las reliquias del santo. Construida en 1089 acoge los cultos católico y ortodoxo ruso. Su campanario y el código medieval iluminado que guarda en su interior son algunos de sus atractivos. Bajo el edificio se encuentran los restos de una antigua catedral bizantina.

Otros monumentos de visita inexcusable son el Palazzo del Sedile dei Nobili (del siglo XVI), la Columna de la Justicia (bautizada por los barienses como la columna infame) y la Fuente Pigna, también conocida como la Fuente de las Cuatro Caras (del año 1600).

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