El Gobierno siempre está con el comercio

Las obras de Hadú tomarán mayor peso desde esta misma semana con el vallado del tramo que va desde la isleta donde se encontraba el monumento de Regulares hasta el Mercado de San José y ello ha propiciado cierta preocupación entre el sector empresarial, pues son conscientes de que vienen meses complicados como consecuencia de los trabajos a realizar. Y es que como en todas las obras, las molestias existen y los contratiempos también. Pero, precisamente, para que las molestias sean las menos posibles, desde el Gobierno de la Ciudad, a través de las Consejerías de Fomento y Hacienda, vienen trabajando desde hace meses. En primer lugar, estudiando las opciones que menos pueden perjudicar y, en segundo, elaborando un paquete de ayudas para los comerciantes que durante estos meses tendrán que sufrir su día a día con todo lo que lleva consigo una rehabilitación de estas características.

Y es que si algo caracteriza al Gobierno de la Ciudad es que siempre ha estado al lado del sector comercial y empresarial. Ocurrió durante las obras de la Gran Vía, también durante la pandemia con los diferentes paquetes de ayuda del ´Ceuta Resiste´y lo hará de nuevo ahora tendiendo la mano a los comerciantes de la barriada de Hadú. Para ello ha preparado un Presupuesto de 300.000 euros, lo que permitirá que los empresarios que cumplan con los requisitos puedan contar con una ayuda mensual de 500 euros durante el periodo de un año, siendo la cuantía total de 6.000 euros.

No cabe duda de que son meses complicados, pues la realidad es que el comercio en Hadú ha ido cayendo de manera progresiva en los últimos años. Pero precisamente esa dinámica es la que se pretende cambiar con esta rehabilitación integral, siendo el principal objetivo recuperar el pulmón comercial que fue Hadú durante años. Por eso, ahora es momento de apretarse los machos, colaborar y tener paciencia, pues una vez que concluya la obra saldrá ganando la propia barriada y, por ende, los empresarios y los vecinos, pues el salto de calidad de vida será abismal, ya no a nivel estético, sino a nivel de salud, pues por fin se solventarán los enormes problemas de corte de luz y agua que ha venido sufriendo la barriada a lo largo de los últimos años.

Como todos los inicios de obra la incertidumbre y las molestias tienen que existir, pero sería bueno que se valorase la puesta en marcha de unas obras que venían siendo demandas desde hace muchos años y que son muy necesarias. Lamentablemente eso de la barita mágica o el hacer las cosas en un abrir y cerrar de ojos no existe.