Ceuta no está sucia por falta de trabajo y esfuerzo, sino por falta de civismo

Juan A. Gutiérrez

La limpieza de Ceuta es, hoy por hoy, unos de los temas más candente de nuestra ciudad.Servilimpce, la empresa encargada del servicio, cuenta con una plantilla comprometida y profesional que día tras día intenta mantener digna una ciudad que parece empeñada en ensuciarse a sí misma. El problema no está en ellos como muchos los culpan, el problema está en el incivismo de parte de la ciudadanía y por supuesto, en que no se hacen de cumplir las Ordenanzas de Limpieza con firmeza.

Pocas ciudades como Ceuta pueden presumir de tener una plantilla tan capaz y tan entregada como la de Servilimpce. Madrugan, soportan condiciones difíciles, y muchas veces, repiten tareas en los mismos lugares porque lo que limpian por la mañana vuelve a estar sucio por la tarde, es frustrante, y no solo para ellos, para el resto de los ciudadanos que sí cumplen, que reciclan, que tiran la basura a su hora y en su sitio. Ver la ciudad en un estado lamentable genera una sensación de abandono que ya no se puede disimular.

¿Dónde está el problema entonces? En el incivismo de quienes dejan muebles en las aceras sin avisar al servicio correspondiente, en quienes sacan la basura a cualquier hora, en los que arrojan colillas, botellas, pañales y papeles, como si la calle fuera un vertedero personal.

¿Las ordenanzas de limpieza existen? sí, pero están en un cajón y si no se aplican, no sirven de nada.

Hace falta poner en marcha campañas de concienciación efectivas, controles, sanciones, etc.

Porque se habla mucho de civismo, pero no se actúa. Y mientras tanto, los trabajadores de Servilimpce siguen recogiendo la misma basura una y otra vez y los vecinos, que sí cuidan su entorno, se sienten cada vez más desamparados.

La limpieza no es solo una cuestión de estética urbana, es una cuestión de salud, de imagen y de convivencia y Ceuta merece más. Merece que se reconozca el trabajo de quienes limpian, pero también merece que se corrija y se sancione a quienes ensucian, porque una ciudad limpia no es la que más se barre, sino la que menos se ensucia.

Señores del gobierno: no basta con barrer y baldear, hay que hacer cumplir, porque si no se aplican las ordenanzas de limpieza, todo lo demás es una fachada.

Al equipo de Servilimpce, gracias por vuestro gran trabajo y dedicación diaria para mantener Ceuta limpia.

¡Sois fundamentales para nuestra ciudad!

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