"Señor Mustafa, afirmar que Ceuta es una colonia es hacerle el trabajo a Marruecos”

Ceuta Ya! se quedó totalmente solo en su intención de reprobar la mala política de defensa de la españolidad de Ceuta que desarrolla el Gobierno de la ciudad presidida por Vivas. Tras un debate que duró 45 minutos, únicamente la formación localista liderada por Mohamed Mustafa votó a favor de la propuesta, siendo el resultado de 2 votos a favor, 17 en contra y 4 abstenciones (Vox y Carlos Verdejo). De esta manera, la Asamblea casi al completo respaldó la gestión de la defensa de la españolidad de Ceuta que viene haciendo el Gobierno de Vivas durante estos últimos 24 y la estrategia empleada.

Durante su exposición, Mustafa reiteró que “la españolidad de Ceuta está amenazada”, subrayando que “los ceutíes somos víctimas de un contencioso político territorial que nos afecta de manera determinante en todos los órdenes de la vida pública y política”.

Además, el líder de Ceuta Ya! insistió en que “hay algo peor que la más absoluta indiferencia hacia nuestra causa por parte del Estado, y es la pasividad de la propia Ciudad, una actitud potenciada y encabezada por un presidente empeñado en demostrarnos, inútilmente, que la españolidad de Ceuta se defiende pronunciando cursilerías y acudiendo a tópicos y frases hechas”, a lo que añadió que “nos están dejando morir”.

La acusación “más grave” a un presidente

El presidente Vivas se mostró muy “crítico y dolido” con Mustafa por su propuesta, y aseguró que “esta reprobación tiene pinta de ser una moción de censura en toda, algo que no ha ocurrido nunca”. Además, se dirigió al líder localista para reprocharle que “pretende que la Asamblea me repruebe con el argumento de dejar morir a Ceuta al no defender nuestra españolidad. Sin duda, la más grave acusación que, desde la llegada de la Democracia, ningún alcalde o presidente de la Ciudad ha recibido en esta sede, porque eso es entreguismo y traición”. lamentó para recalcar a Mustafa que “dice en su propuesta que la adhesión de Ceuta y Melilla es un objetivo prioritario del Reino de Marruecos, a lo que añado, que ustedes son un aliado muy útil al servicio de las infundadas pretensiones de dicho país, ya que ustedes comparten, de manera pública, como ha quedado constatado recientemente en esta misma Asamblea, el principal argumento esgrimido por Marruecos en sus infundadas pretensiones: que Ceuta es una colonia”. A ello añadió que "la baza más importante que tiene Marruecos para decir que Ceuta no es España es afirmar que Ceuta es una colonia y aquí el único que ha dicho eso es usted, así que ya me dirá quien le está haciendo el trabajo a Marruecos".

“Están ustedes en su derecho de acusarme de traidor, de reprobarme, de considerarme el enemigo, pero, por favor, si de verdad quieren a esta tierra, no digan más que somos una colonia”, reprochó el presidente para dejar claro que “prefiero que me llamen traidor a que digan que hemos convertido a Ceuta en una colonia”.

La defensa de la soberanía y españolidad

En este sentido, continuó expresando que “defender nuestra irrenunciable soberanía, nuestra españolidad, debe ser la primera inexcusable prioridad del presidente y alcalde de la Ciudad, empleando cuantos medios estén a su alcance, para lo que sea menester”.

Además, insistió en “la defensa de nuestra españolidad como primera e inexcusable prioridad porque así lo establece la Constitución y el Estatuto de Autonomía, para ser fiel al legado recibido y por respeto a la voluntad de los ceutíes, de todos los ceutíes, al margen de credo, origen o cultura. Así lo entendí desde el primer día que tuve el honor de asumir la presidencia de la Ciudad, sin negar nunca, al contrario de lo que usted afirma en su propuesta, que la anexión de Ceuta y Melilla es un objetivo irrenunciable de Marruecos; todo lo contrario, cada vez que tengo oportunidad afirmo, con total rotundidad, que nuestra ciudad está afectada por unos condicionantes, riesgos y amenazas sin parangón en el resto de España, entre ellos los de índole geopolítica”.

Por tanto, Vivas subrayó que “ignorancia, ninguna” y “tampoco pasividad”, recordando que “desde el primer día y hasta el momento he mostrado una actitud de permanente implicación en relación con la defensa de nuestra españolidad, una implicación sustentada en una estrategia clara y definida”.

Estrategia

En referencia a la estrategia, el presidente de la Ciudad enfatizó ante las acusaciones de Ceuta Ya” que “para mí no es cursilería, ni tópico ni frase hueca defender, pues estamos hablando, pues nos estamos refiriendo a la necesidad de una política de Estado que tenga por objeto la protección de nuestras dos ciudades autónomas a través de la equiparación con el resto de España de los niveles de calidad de los suministros y servicios esenciales, cualquiera que sea la Administración competente, de inclusión social, de oportunidades de empleo y de acceso a la vivienda”

En esta línea se refirió al despliegue de las capacidades de defensa que sean precisas para el debido cumplimiento del mandato contenido en el artículo 8 de la Constitución como el fortalecimiento de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad; la configuración de un modelo económico sólido y estable, centrado en la idea de más España y más Europa; la normalización de la frontera de acuerdo con su condición de frontera exterior de la Unión Europea, tanto para el tránsito de personas como de mercancías; la limitación de la capacidad de acogida de menores migrantes, adultos y menores, al tamaño de nuestra población y al peso de la misma en el conjunto de España y la compensación a la ciudad de los mayores costes derivados de los condicionantes estructurales.

Como “pilares fundamentales”, Vivas destacó la unidad de los ceutíes en el sentimiento de pertenencia a España, la comprensión, aprecio y respeto de la diversidad cultural de nuestra gente; en definitiva, de la convivencia, la lealtad institucional para poner los intereses de Ceuta por encima de cualquier otro y el “deseo” de unas buenas relaciones con el país vecino, beneficiosas para ambos, y basadas en el respeto y la reciprocidad. “Unas buenas relaciones que nunca pueden impedir la obligación de defender con firmeza nuestra integridad y soberanía y, en consecuencia, de, por una parte, mantener activadas las anteriormente comentadas capacidades de prevención y disuasión en el ámbito de la defensa, y, por otra, no depender del país vecino en asuntos vitales para nuestra ciudad”, insistió Vivas.

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