Mujeres pioneras, mujeres referentes

No todos los aniversarios son iguales. Algunos se celebran con discursos de rigor, otros con verdaderas lecciones de memoria y justicia. El 50 aniversario de la incorporación de la mujer a la Policía Local de Ceuta pertenece, sin duda, al segundo grupo. El acto celebrado en el Salón del Trono del Palacio Autonómico no fue solo una recepción oficial: fue un abrazo colectivo, un homenaje merecido a quienes, en 1975, rompieron barreras con determinación, vocación de servicio y mucho coraje.

Carmen Godino, una de aquellas seis primeras agentes, lo resumió con humildad y emoción: “Fuimos recibidas como una más”. Aquellas palabras, tan sencillas como poderosas, definen el espíritu de esta celebración. Porque si hoy es normal ver mujeres con uniforme policial, es porque otras abrieron camino cuando no era tan fácil. Sin redes sociales, sin titulares ni “reconocimientos” al momento, pero con la misma entrega que hoy admiramos.

La visita de casi 150 mujeres agentes de toda España ha puesto en valor no solo la trayectoria de nuestras pioneras, sino también el compromiso actual de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad con la igualdad real. La presencia de policías locales, nacionales, guardias civiles y miembros de la Ertzaintza ha reforzado una idea sencilla pero potente: las mujeres no solo están en todos los cuerpos, sino que los enriquecen con su talento y humanidad.

El presidente Juan Vivas acertó al hablar del calor humano que se respiraba en el salón: eso no se improvisa, se gana con respeto. Porque más allá del simbolismo institucional, lo vivido en Ceuta estos días ha sido un homenaje auténtico, con nombres, con historias, con lágrimas de emoción y gratitud. Y sí, también con orgullo, el mismo que sienten las compañeras de Teresa, Rafaela y Pilar, presentes en la memoria de todos.

En tiempos de tanta prisa, de tanta superficialidad, da gusto detenerse a mirar atrás y reconocer a quienes abrieron senda sin pedir nada a cambio. Que estas jornadas sirvan para recordar que la igualdad se conquista paso a paso, cuerpo a cuerpo… y que Ceuta, en esto también, tiene mucho que enseñar.