La madre de los hermanos del altercado de Bermudo Soriano niega que ellos le pegaran

TRIBUNALES

Ambos varones han salido absueltos en sendos juicios rápidos por falta de pruebas. No hay víctimas heridas de gravedad, aunque la mujer acusa a la Policía de haber sufrido abrasiones y policontusiones

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“El daño ya está hecho, pero quiero un poquito de justicia”. La madre de los hermanos involucrados en una discusión este martes que acabó con el salto por la ventana del menor de los varones niega que estos hayan ejercido, ni ahora ni anteriormente, violencia doméstica contra ella misma. De esta manera, la mujer contradice la versión que la propia Policía Nacional ha hecho pública a través de una nota de prensa, así como otros detalles que considera escabrosos como que el más joven hubiese lanzado “cristales y cuchillos” contra los agentes. En la misma línea, mantiene que no hubo negociación de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado con su hijo de 17 años, así como descarta que en el operativo actuara la figura policial de un negociador.

Tras una noche en la que confiesa que no ha “pegado ojo”, la madre de la familia protagonista de un altercado que pudo haberse saldado con el suicidio del menor de los hermanos ha querido poner ‘pie en pared’ y dar su versión de los hechos, la misma que ha recogido la Policía Nacional en su atestado y han escuchado los magistrados de los juzgados de Guardia y de Menores este miércoles.

El atestado, expedido en Instrucción poco después de las 21:00, al menos dos horas después de la intervención policial y al que ha tenido acceso El Pueblo de Ceuta, recoge la versión de la mujer en calidad de denunciante. Entre las 18:00 y las 19:00 de la tarde del martes los dos hermanos, uno mayor de edad y otro de 17 años, tuvieron una discusión en su domicilio de la barriada Bermudo Soriano. La madre mantiene que la disputa fue concretamente por la propiedad “de un calzoncillo azul”. En el acolaramiento, el menor de ellos “se atrincheró” en la cocina interponiendo la lavadora y el lavavajillas como barricada, y luego llamó a la Policía.

Los agentes llegaron a la casa e intentaron evitar que el joven se precipitara de una altura de alrededor de 10 metros desde la segunda planta hasta el suelo, si bien finalmente acabó cayendo en la chapa que separa la planta baja de la primera recorriendo en el aire solo unos seis o siete metros tras las llamadas de atención de los agentes y la irrupción de los mismos en la cocina. Un tendedero de la primera planta también amortiguó el impacto de la caída.

“El salto fue provocado por la misma Policía, que no ha actuado debidamente. Se tiró porque se asustó”, explica la mujer a este diario, al tiempo que niega que existiera un negociador entre los “más de 12 policías” que había en su casa.

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Al entrar en la cocina los efectivos actuantes rompieron la puerta acristalada y los referidos electrodomésticos.

Antes, tanto la madre como un vecino allí presente habían pedido a los policías hacerse cargo de la situación, pero no tuvieron éxito. La versión policial es que el joven les lanzó parte de la vajilla y los cristales a los agentes, pero la mujer manifiesta que a él no le habría dado tiempo de hacer eso porque el adolescente ya se encontraba en la ventana cuando los los agentes rompieron la puerta.

Según su versión, también pisotearon los cubiertos y los platos, así como ella quedó tendida en el suelo y le pisaron el tobillo derecho y la mano izquierda. Existe un parte de lesiones emitido por el Hospital Universitario de Ceuta que recoge policontusiones y abrasiones, así como la atribución de estas heridas a la actuación de los agentes.

Incluso mantiene que fue amenazada por los policías con ser detenida, si bien finalmente no fue arrestada, a diferencia de sus hijos. El menor también fue trasladado al Hospital, si bien solo ha sufrido finalmente una contusión en el costado producto de la caída. A diferencia del adolescente, el mayor de los varones no opuso resistencia a las órdenes policiales e intentó que su hermano saliera de la cocina dándole voces, pero tampoco lo consiguió.

“Mi hijo se ha salvado y ha tenido suerte, pero ellos han metido la pata”, relata la progenitora, en referencia a la actuación policial, a la que culpa de haber roto el mobiliario y de haber entrado en la casa sin permiso. Con estos argumentos y tras “el susto” vivido, la mujer estudia tomar medidas legales.

Ambos absueltos

Tanto el mayor como el menor de los varones fueron detenidos este martes y puestos a disposición judicial en la amañana del miércoles.

Se han celebrado dos juicios rápidos, uno en el Juzgado de Guardia y otro en el de Menores, pero ambos implicados han salido absueltos por falta de pruebas tras la personación en las vistas tanto de la madre como del vecino testigo del altercado.

Ninguno de los hermanos ha testificado contra el contrario, así como tampoco se han recabado más pruebas de cargo por parte de los testigos.

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