“Ha sido un Ramadán muy triste”
RAMADÁN
Con el Eid al-Fitr Ceuta se despide de este Ramadán 2020 confinado, atípico y triste para una comunidad musulmana que destaca el respeto y la convivencia.

Con la llegada del Eid al-Fitr se ponía este domingo punto y final a este Ramadán 2020 en Ceuta. Un mes sagrado que para un musulmán siempre suele ser una fecha señalada en el calendario, especial, y que siempre suele ser acompañada de la familia, los amigos y los vecinos. Sin embargo, la pandemia del coronavirus se ha llevado por delante todo esto en este Ramadán 2020 que acaba de llegar a su ocaso con la noche más importante, la última ruptura del ayuno.
“Para nuestra asociación ha sido el más triste de la historia ya que no se ha hecho el rezo colectivo del musal-la, que es el más importante”, afirma con pena Jalil, miembro de la Asociación Al-Idrissi.
Otro que comparte esta tristeza de este Ramadán 2020 confinado es Abselam, que también es conocido por muchos en la ciudad por su pertenencia al Club de Petanca Equipo Mariano de Ceuta. Abselam afirma que “este año está siendo un poco triste”, aunque se siente afortunado por poder pasarlo junto a su familia y sin tener apuros económicos, como miles de musulmanes de Ceuta que durante estos días se han visto obligados a recurrir a la caridad para completar su cesta de la compra de cara al Ramadán: “Estamos estupendos. Lo estamos pasando con la familia. Gracias a dios no tenemos ninguna necesidad”.

Hamido Mohamed, presidente de la Comisión Islámica de España en Ceuta, se muestra más positivo con este Ramadán y antepone lo bueno de este atípico mes a lo negativo: “Hemos tenido que celebrar todo el ayuno y el rezo en casa este año. Por tanto, toda la actividad espiritual se ha desarrollado en nuestras casas y eso ha generado el beneficio de que la familia se ha reconciliado, debido a que ha podido tener más tiempo de poder charlar, unir criterios, compartir cosas… y eso ha sido fundamental para que muchas personas perdonaran errores de discusiones o enfados. Ha generado algo positivo en las familias”.
Además, todos destacan la facilidad con la que la comunidad musulmana en particular, y el pueblo ceutí en general, se ha adaptado a esta situación. Para Hamido, “a la comunidad musulmana no le ha costado confinarse, ya que salvando excepciones –que son muy pocas- todo el mundo ha sabido llevar a cabo el ayuno en sus casas. Todos los barrios musulmanes hemos cumplido con la orden del Gobierno. Y se ha notado porque Ceuta es una de las ciudades con menos contagios. Las estadísticas hablan por sí sola, si la comparamos con otras ciudades de las mismas dimensiones”.
Para Jalil el único lado positivo de este Ramadán ha sido éste también, el ejemplo que ha dado la comunidad musulmana respetando el confinamiento: “Gracias al confinamiento que hemos conseguido hacer, tras cerrar las mezquitas y todas las asociaciones, se ha conseguido rebajar casi al mínimo los afectados aquí en Ceuta. La mitad de la población es musulmana. Imagínate si se hubiera hecho un Ramadán normal y no se hubieran cerrado las mezquitas… no creo que estuviéramos como estamos hoy en día, con tan pocos contagios en la ciudad. Ese es el lado positivo de este Ramadán: chapó para todo el mundo por encerrarse en sus casas y por no salir por las noches”, tal y como estaba acostumbrada a hacer la comunidad musulmana en este mes sagrado.
El Eid al-Fitr
Algunos afirman que con la llegada del Eid al-Fitr se ha aumentado el movimiento de musulmanes entre casas, aunque otros opinan lo contrario. Jalil narra que en la noche de este domingo ha podido apreciarse “mucho movimiento de personas. La gente ha ido de casa en casa a felicitar a las familias”. El culmen a un Ramadán que ha sido agridulce para la comunidad musulmana: “Este año ha sido muy diferente por la pandemia. No queremos pasar otro Ramadán como el de este año. Este es uno de los meses donde más actividades hacemos desde nuestra asociación y no las hemos podido hacer. Ha sido fatal para nuestra gente”.
Sin embargo, Hamido y Abselam opinan lo contrario. El presidente de la CIE afirma que si devotos de la comunidad musulmana se están reuniendo en sus casas de seres queridos “es respetando lo dictado por el Gobierno, no más de 10 personas”. Aunque él no se ha reunido en otros hogares: “Yo tengo mucha familia y este año no he podido reunirme ni con mi hermana, ni con mi cuñado, ni con mis sobrinos… Lo hemos hecho en un círculo muy reducido, con mis hijos y poco más, y la mayoría lo ha hecho así”.
Por su parte, Abselam cuenta que está celebrando este fin del Ramadán junto a su mujer, sus dos hijas y su yerno, pero sin ir a visitar a sus familiares, vecinos y amigos, ya que prefiere mantener la prudencia en su caso: “Cada uno en su casa y Dios en la casa de todos”. Por ello, las redes sociales se han vuelto indispensables en estos momentos: “Gracias a que tenemos Facebook y el teléfono pues estamos en contacto, nos felicitamos por ahí y nos enviamos fotos”. Por tanto, este 2020 afirma que “el rezo este año está siendo muy familiar, en casa”.
Felicitaciones por el fin del mes sagrado
Desde la Comisión Islámica de España en Ceuta felicitan “a toda la ciudadanía, no solo a la musulmana, porque Ceuta una vez más demuestra que sabe convivir, que la gente que tenemos aquí es gente adulta e inteligente. Todas han sabido cumplir con el respeto hacia el prójimo. En el importante día que estamos hoy la gente se transmite alegría y felicidad. Por ello, debemos sentirnos afortunados tanto dentro de la comunidad musulmana, como la no musulmana, es un día donde se ve la generosidad. La gente tiene ganas de ayudar, colaborar y dar limosna a quien lo necesita, purificando el mes ayunado”.
Desde Al-Idrissi felicitan “a toda la comunidad musulmana de Ceuta, que es alrededor de la mitad de la población de la ciudad, y además al resto de comunidades como la cristiana, la hindú o la hebrea también”.
Por último, Luna Blanca aprovecha para felicitar también el final del mes sagrado: “Felicitar a la comunidad musulmana por este fin del Ramadán. Que dios nos una todos los corazones y que la paz impere entre nosotros y todo el tejido social ceutí”.
Además, su presidente, Mustafa, destaca de la comunidad musulmana “su valentía, inteligencia, aguante por saber cumplir con la normativa vigente, respetar el estado de alarma y llevar a cabo a rajatabla las instrucciones de las autoridades sanitarias. Nuestros resultados hablan por sí solo.
Esta ONG, que ha repartido a diario una media de 1.800 menús para aquellas familias que necesitaban romper el ayuno, afirma que volverán ahora a su actividad normal de asistir a una media de 160 familias desfavorecidas.