La ambición de Ceuta frente a la ambigüedad de Melilla
POLITICA
Los presidentes de las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla, Juan Vivas y Eduardo de Castro, han puesto de relieve su posición en cuanto al ingreso en la Unión Aduanera, a raíz de una pregunta formulada por el periodista Ignacio Cembrero durante la presentación en Bruselas del informe realizado por el eurodiputado Jordi Cañas

El debate ya está servido. Y no es en relación al informe del eurodiptuado Jordi Cañas que habla sobre las estrategias para una mayor integración política de Ceuta y Melilla en la Unión Europea. Este debate gira más bien en torno a las posiciones que mantienen ambas ciudades autónomas en torno a una cuestión: el ingreso en la Unión Aduanera.
La controversia surge a raíz de una pregunta formulada por el periodista de ‘El Confidencial’, Ignacio Cembrero, durante la rueda de prensa de la presentación de dicho informe. El periodista preguntaba al presidente de la ciudad autónoma de Ceuta, Juan Vivas, “¿qué le hace pensar que pueden cambiar las cosas?”, puesto que esta petición cuenta ya con más de 10 años. “El impacto del episodio de mayo condiciona todo”, ha sido la respuesta ofrecida por Vivas.
Pero el debate no está en esa respuesta, sino en la firme y clara posición que ha demostrado el jefe del Ejecutivo ceutí, apostando explícitamente por esta integración, frente a la respuesta dubitativa y poco concisa emitida por el presidente de Melilla, Eduardo de Castro. “El Gobierno de Melilla no tiene nada que ver con el de Ceuta en su composición”. Mientras que Vivas tiene muy clara cuál es la postura de Ceuta ante esta situación, incluso llegando a poner condiciones como que se mantenga el régime económico fiscal especial con el que cuentan ambas ciudades, De Castro se inclina más por buscar otras alternativas. “Hay un camino que recorrer y es largo. Por eso he hablado de la zona económica y de otros mecanismos que nos permitan ir consiguiendo objetivos que luego puedan aumentarse en el caso de la entrada de la Unión Aduanera”, ha expresado el presidente de Melilla.
Es aquí donde Cembrero asegura que se ha iniciado un debate, ya que con la presentación del informe se ha reactivado nuevamente esa cuestión, ya solicitada como decíamos al principio por Ceuta hace más de 10 años, y que, además, “da un poco a conocer las aspiraciones, por lo menos de Ceuta, porque no estoy seguro de que Melilla las comparta”, ha señalado el periodista.
Cembrero, ante esta situación, no ha podido evitar emitir su opinión, señalando que “Ceuta es mucho más ambiciosa, quiere más Europa, quiere Unión Aduanera y quiere el ingreso en el espacio Schengen”. Melilla, por otro lado, “es más reacia a todo, por lo menos el actual Gobierno. El Partido Popular, que en Melilla está en la oposición, si llegase al Gobierno de la ciudad, haría otra política”, ha asegurado Cembrero.
Pese a estas diferencias en cuanto posturas, el principal problema aquí no es si Ceuta quiere más y Melilla tiene menos aspiraciones. El principal problema “es la inacción del Gobierno central, no ahora, sino desde hace mucho tiempo, desde que Ceuta, por primera vez, pidió su incorporación”, ha resaltado el periodista.
Después del 17-M, el entonces secretario de Estado para la Unión Europeo del Ministerio de Asuntos Exteriores, Juan González-Barba, y quien fuese por ese momento el secretario de Estado del Ministerio de Política Territorial y Función Pública, Víctor Francos, visitaron ambas ciudades autónomas asegurando que la respuesta “iba a ser enérgica”.
De eso ha pasado ya un año “y el Gobierno no ha dado un paso”, llegando incluso a ofrecer al presidente de Ceuta “respuestas evasivas” por parte del ministro de Exteriores, José Manuel Albares.
Habrá que seguir esperando para ver cómo se resuelve este debate, una vez ya presentado el informe al que, según ha indicado Cembrero, “le falta el análisis geopolítico”, así como “las consecuencias que esto podría tener sobre las relaciones con Marruecos, porque, sin lugar a dudas, a Marruecos no le gustará que Ceuta entre en la Unión Aduanera y en el espacio Schengen”, ha concluido.