"Ceuta y Melilla no son una prioridad ni en la Unión Europea ni en España"
UNIÓN EUROPEA
El eurodiputado por Ciudadanos Jordi Cañas expone las ventajas de que las ciudades sean integradas en el Territorio Aduanero de la Unión (TAU), aclarando que las decisiones deben pasar "por un debate interno de la sociedad civil"
La rotundidad con la que el eurodiputado Jordi Cañas sentencia que "Ceuta y Melilla no son una prioridad en la Unión Europea ni en España" va acompañada de una apelación directa a la ciudadanía de ambas ciudades. "La sociedad civil debe tener un debate interno para analizar qué le gustaría tener. Y asumir los costes de las decisiones que adopta". El representante de Ciudadanos en Bruselas ya expuso ventajas y desventajas de eliminar la excepción Shengen, alcanzar la denominación de `regiones ultraperiféricas´ y la integración de las ciudades autónomas en el Territorio Aduanero de la Unión (TAU). Esta última, para Cañas, "podría tener un impacto importante". Pero, insiste, son "los ciudadanos" quienes deben "decidir y exigir a sus responsables políticos".
Tras la entrada masiva de personas migrantes en Ceuta ocurrida en mayo de 2021, el político trasladó la problemática al Parlamento Europeo, impulsando "una solución histórica, de reconocimiento de la soberanía de España sobre Ceuta y Melilla". Aquello motivó la realización de un análisis técnico, de dimensión económica, política y jurídica, para identificar "cuáles son las singularidades" de las ciudades autónomas. Las resume en las siguientes: la no consideración de las mismas como `territorios ultraperiféricos´ y la no pertenencia al espacio Shengen y al Territorio Aduanero de la Unión (o Unión Aduanera). Del documento, que llevó por título `Ceuta y Melilla. Más España, Más Europa´ y que fue presentado en el Parlamento Europeo en junio de 2022, extrajo numerosas conclusiones, pero todas las soluciones posibles, para Cañas, pasan por la movilización de la sociedad.
Lo aclara desde el inicio: no es "un experto", simplemente "un ciudadano español" que quiso "contribuir a que dos de sus ciudades tengan el trato que se merecen". Parte de la base de que ese nicho "importante de su economía vinculada al comercio informal con Marruecos" se acabó. Para éste, la estrategia del vecino consiste ahora en "asfixiar económicamente a Ceuta y Melilla, para irles quitando sentido económico. Ese "cambio de modelo económico", además de pasar por el debate interno de la sociedad civil, del Gobierno de España y de los autonómicos, debe, para él, llevar consigo una mayor vinculación con la Unión Europea.
Pertenecer a la misma, según el eurodiputado, en la actualidad tiene pocos beneficios para los ceutíes y melillenses. "¿Cuál es vuestro beneficio de pertenecer a la Unión Europea? Alguna subvención, pero nada más".
La `Unión Aduanera´
Considera que la situación actual no se puede mantener en el tiempo. Es por esto que, en primer lugar, Cañas aboga por la integración de las ciudades en el Territorio Aduanero de la Unión (TAU). Pertenecer a la también llamada Unión Aduanera, como lo hace España desde 1986, ahorraría a los comerciantes los trámites administrativos, no estarían obligados a elaborar un DUA de importación, además de eliminarse los controles aduaneros sobre la mercancía que entrase en los países que pertenecen al tratado.
Las Islas Canarias tampoco fueron incorporadas al tratado a la vez que España, pero lo hicieron más tarde. Y sin necesidad de renunciar a su Régimen Económico y Fiscal Especial. Continúan aplicando su IGIC (Impuesto General Indirecto Canario) , y no el IVA, como el resto de países miembro. En el caso de Ceuta, confía el de Ciudadanos en que "se podría mantener. Seguro, porque hay otros territorios dentro de la Unión Europea que mantienen singularidades fiscales". En el informe `Más España, Más Europa´ se manifiesta que esta "falta de armonización fiscal" entre Ceuta y Melilla, que aplican el IPSI, y el resto de países pertenecientes al tratado, con el IVA, "supone la obligación de realizar controles aduaneros para liquidar ambos impuestos".
Cañas explica que ese "déficit de armonización" ya ocurre dentro del TAU, pero prevalecería la "seguridad fiscal" que adquiriría Ceuta. Argumenta que en la actualidad ambas ciudades no solo son consideradas Tercer Estado a efectos aduaneros, sino "mucho peor". "Europa tiene acuerdos con muchos terceros estados, pero no con Ceuta y Melilla. Por eso mucha gente dice: `Es que cuesta menos importar desde Marruecos que desde Ceuta. Claro, porque no hay ningún acuerdo".
"Los Gobiernos autonómicos deberían tener aquí -en Bruselas- oídos y palabra para defender los intereses de Ceuta y Melilla"
Más allá de los beneficios de entrar en el TAU, los costes arancelarios dejarían de ser inexistentes y deberían adaptarse al Código Aduanero de la Unión (CAU). Para Jordi Cañas se trata de un riesgo que sería conveniente asumir. "En esta vida todo no se puede tener". Y vuelve a insistir en que el debate debe ser de la sociedad. "La pregunta es: ¿os compensa? Pero eso lo tienen que pensar los afectados sabiendo qué pasará".
"Yo estoy en Europa y aquí las asociaciones y los ciudadanos se mueven. Se preocupan y piensan en el futuro". Según éste, los comerciantes "no pueden estar pensando solo en cuánto van a vender hoy, sino en si van a vender mañana, ya que "si esperan que aquellos que no han vendido nada en su vida piensen por ellos lo llevan claro. ¿Los políticos venden algo?". Defiende que, dada la imposibilidad de garantizar el mantenimiento de la actividad comercial de antaño, con Marruecos, Ceuta "sin dar la espalda a África, debe saber que su futuro pasa por una mayor vinculación con la península y con Europa".
Recuerda que en sus encuentros con el presidente del Ejecutivo local ceutí, Juan Vivas, le preguntaba si contaban con delegación en Europa. La Ciudad continúa sin tenerla, lo que para éste es incomprensible. "Deberían tener aquí -en Bruselas- oídos y palabra para defender los intereses de Ceuta y Melilla. Y los empresarios igual: ¿trabajan con las asociaciones europeas? En un mundo interrelacionado hay que tener presencia donde se toman las decisiones". E incide en que, "desgraciadamente, "Ceuta y Melilla no son una prioridad en la Unión Europea ni en España". "Eso hay que saberlo. Y si eso lo sabes intenta que tu agenda y tus intereses estén encima de la mesa".