La resonancia del millón de euros no podrá someter a pruebas a todos los pacientes de Ceuta

La inversión millonaria del INGESA en la resonancia magnética instalada en noviembre de 2023 en el Hospital Universitario de Ceuta “no merece la pena” para muchos de sus profesionales. Con un imán de 3 teslas, es una de las máquinas para estudios radiológicos más avanzadas del mercado, al alcance de los “hospitales punteros”. El Virgen del Rocío de Sevilla la adquirió recientemente. Solo que este cuenta con una plantilla de 52 radiólogos, mientras el del INGESA se limita a 5, de los cuales solo 2 se está formando para hacer uso del aparato. El sevillano posee, además, otras resonancias de menor potencia, que permiten someter a las pruebas a un mayor número de pacientes. El de Ceuta posee ahora solo ‘la del millón de euros’, incompatible con determinados pacientes, que deberán ser derivados a la privada.

La inversión del Instituto Nacional de Gestión Sanitaria (INGESA) en el aparato fue de 1.252.717 euros, sumado a los 534.175 euros que el organismo dependiente del Ministerio de Sanidad desembolsó para la obra de adecuación a la nueva resonancia de la sala donde solía estar la antigua, con una potencia infinitamente menor, de 0’3 T. Gracias a la potencia de la resonancia magnética de 3 teslas, es posible diagnosticar lesiones que no se apreciarían con otros equipos. Pero como consecuencia de la referida potencia, la máquina no es compatible con pacientes con marcapasos, implantes cocleares, determinadas prótesis o Desfibriladores Automáticos Implantables (DAI). Es por esto que los hospitales que suelen adquirir tales herramientas cuentan también con otras menos avanzadas, con mayor compatibilidad, además de con una plantilla más amplia.

“¿Para qué quieres una resonancia de 3 teslas si no vas a hacer Radiología avanzada?”, se pregunta un radiólogo con más de 17 años de experiencia en la medicina, quien prefiere mantenerse en el anonimato. Ajeno al territorio INGESA, trabaja en un hospital cuyo equipo radiológico se compone de 8 especialistas. Su resonancia magnética es de 1’5 teslas. Lo mismo en la SEPTEM y en la Clínica Radiológica, las dos clínicas privadas de Ceuta que desde hace años asumen la realización de las pruebas de radiodiagnóstico a las que la antigua resonancia del HUCE no llegaba.

"Si no vas a hacer corazón, si no vas a hacer interna, mama o espectroscopias, ¿para qué quieres la resonancia de 3 teslas?”

Reconoce el especialista que “la 3 teslas es infinitamente mejor que otras con imanes inferiores”, pero, para él, pasar de una de 0,3 a una de 3 “es como tener un Ferrari de entrada cuando todavía no has manejado un Golf”. “No te vas a meter en comprar lo mejor cuando quizás las necesidades de tu hospital están más que cubiertas con una resonancia de 1’5 T”, expone, matizando al instante que desconoce las necesidades de los radiólogos en Ceuta.

“Si tienes pacientes en Neurorradiología o con displasias corticales, la 3 teslas es fundamental. Hay patologías que pueden pasar desapercibidas en una 1’5. Pero no tiene sentido comprarla si lo que vas a hacer son cráneos con contraste, abdomen, rodilla y columna. Si no vas a hacer corazón, si no vas a hacer interna, mama o espectroscopias, ¿para qué la quieres?”, aclara el doctor, que ejerce actualmente en un hospital de Andalucía.

Facultativos del HUCE han confesado a El Pueblo de Ceuta que, si bien es cierto que con tal resonancia “se puede hacer de todo”, será “complicado” desarrollar la “radiología avanzada” de la que habla el especialista andaluz: “El problema es que no tienen ni personal ni tiempo. No hay ningún hospital en España que tenga esta máquina con solo dos radiólogos que la puedan utilizar”. Creen que habría sido “más inteligente” hacerse con una de 1’5 teslas, “que puede satisfacer las necesidades que tiene el hospital y es bastante más económica”. “Eso se llama adecuación de los medios diagnósticos y terapéuticos”.

Privatización del servicio

Las millonarias inversiones del INGESA en maquinaria de última generación tienen el objetivo de permitir la mejor asistencia a los pacientes ceutíes, evitando forzarlos a desplazarse hasta la península o las clínicas privadas para recibir tratamientos. Sin embargo, en el caso del examen imagenológico a cargo de la resonancia, tendrán que continuar externalizando el servicio de la prueba para determinados pacientes. Este diario ha contactado con la SEPTEM y la Clínica Radiológica, confirmando que las resonancias magnéticas con las que cuentan son de 1’5 T, las cuales “asumen un mayor número de pacientes que la de 3 teslas. Conforme aumenta el imán, más se restringe el tipo de pacientes que puede entrar”.

El especialista andaluz aclara cuáles son las contraindicaciones absolutas y las relativas de la resonancia de 3 teslas. Los pacientes que “no pueden acceder” a la máquina son “todos aquellos que tienen marcapasos, Desfibrilador Automático Implantable (DAI) e implantes cocleares (sordos)”. Las contraindicaciones “relativas” son para los pacientes con implantes metálicos de prótesis. Existe “una guía” que desglosa qué prótesis pueden entrar y cuáles no. “Hay muchas prótesis antiguas que no se han probado en esas máquinas. Por prudencia y seguridad del paciente prefieres no someterlo a la prueba”, explican otras fuentes consultadas por El Pueblo de Ceuta.

Matiza el radiólogo ajeno al territorio INGESA que la resonancia 1’5 también tiene contraindicaciones, por ejemplo, para los pacientes con marcapasos. Aunque “es más permisiva que la de 3 teslas”, la cual “limita mucho”. Si en otros hospitales se la permiten es porque, remarca, también cuentan con resonancias de imanes inferiores. “Lo primero que adquirió el Virgen del Rocío fueron varias resonancias de 1’5 T. Ahora tienen una 3 teslas, pero desde hace poco. Y tienen pensado cambiar las 1’5 porque tienen muchos años, pero no por otras de 3 teslas, sino por las mismas, de 1’5”.

- ¿Qué va a pasar con esos pacientes?

- Que se derivarán a la privada, claro.

Los afectados por las restricciones derivadas de la potencia del imán de la nueva resonancia serán derivados a las clínicas Septem o Radiológica, las únicas de Ceuta que cuentan con tal equipo. Este diario ha tratado de contrastarlo con el INGESA sin haber recibido respuesta aún. Los profesionales médicos contactados garantizan que la máquina de 0’3 teslas ha tenido que ser “desechada” ya que “no cumplía con las expectativas”, obligando a externalizar más de la mitad de las pruebas que se hacían.

“No digo que esté mal comprar una 3 teslas, eh”, matiza el especialista andaluz consultado. “Si a mí me dicen que van a poner una igual en mi hospital lo agradezco mucho. El tema es, ¿disponen de personal para usarla y para formar a los profesionales? Esto ocurre también con la de 1’5”. En el HUCE tienen claro la respuesta: “No”.

Al menos 9 radiólogos

Tres de los cinco radiólogos están en edad cercana a la jubilación, los otros dos restantes son los únicos que, según las fuentes consultadas, se encuentran en formación para el uso de la resonancia. “En el Carlos Haya de Málaga tienen cerca de 30 radiólogos, cada uno dedicado a un área muy concreta. También con residentes, con plazas de formación. Eso te permite hacer cosas innovadoras”. Pero en Ceuta son solo 2 y, aseguran, serían necesarios “al menos 9 radiólogos” para comenzar a sacar provecho de la máquina. Sobre si consideran que el INGESA se encuentra en búsqueda activa de especialistas en Radiología, creen que no. “Poner un anuncio no es buscar. Buscar es lo que ha hecho Baleares, generando incentivos para atraer oncólogos porque era un puesto de muy difícil cobertura”.

“Con esa máquina se puede hacer de todo. Incluso cosas que jamás se harán porque no hay tiempo ni personal"

Hasta hace unos meses, Ibiza contaba con un solo oncólogo para una población de casi 50.000 habitantes. Después de que el Gobierno balear aprobara el complemento de 20.000 euros la plantilla ascendió a 4, relató a El Pueblo de Ceuta el presidente del Sindicato Médico Balear, Miguel Lázaro. “Pero aquí no se está haciendo eso”, afirman. Los radiólogos de Ceuta, al igual que ocurre en otras especialidades como Traumatología, Cardiología o Endocrinología, “tienen mucha carga de trabajo”. “Por Radiología pasa todo. No es un trabajo que esté reconocido, pero lo ven todo de la cabeza a los pies. En otros sitios se organizan de forma que hay unidades específicas. No hay un radiólogo de TAC y otro de resonancia, sino que hay unos para riñón, otros para Urología, otros para Neuropediatría… Aquí no”.

Por lo pronto, confirmó el INGESA que los radiólogos se encuentran formándose para poder usar la resonancia magnética de 3 teslas. Mientras el organismo no detalló si los 5 en plantilla están siendo preparados, otras fuentes consultadas del interior del HUCE afirman que son solo 2 y que realmente no se ha comenzado con un proceso formativo oficial. Según cuentan, los especialistas están estudiando por cuenta propia, pero carecen de una “formación planificada”.

Esperan en el Universitario que la inversión millonaria en recursos materiales se equipare a la contratación de personal. “Con esa máquina se puede hacer de todo. Incluso cosas que jamás se harán porque no hay tiempo ni personal. Si ahora aparecen 5 o 6 radiólogos de golpe, quizás puedan, pero ahora mismo esa no es la realidad de Ceuta. La realidad es que desde hace más de 10 años es cada vez más difícil que venga gente. Y que se asiente”.