La pista deportiva de Miramar Bajo ya luce una imagen renovada

La barriada Miramar Bajo ha dado un cambio. Aunque no se hayan llevado a cabo reformas de gran envergadura, una vuelta por la zona confirma que la ciudad ‘ha metido mano’. La pista deportiva en la que juegan los jóvenes luce una imagen totalmente renovada después de que se reparara el vallado perimetral del campo, se instalaran bolardos para evitar la invasión de vehículos y se pintara por completo de extremo a extremo. Además, se han llevado a cabo varias actuaciones como la instalación de nuevo mobiliario urbano y se está continuando con la campaña de asfaltado que se está realizando en 100 calles de Ceuta. El presupuesto de ejecución ha tenido un coste de casi 44.000 euros.

Las actuaciones, todas menores, se dividen en siete. La Ciudad, a través de la consejería de Fomento, ha llevado a cabo la instalación de más mobiliario urbano que se había solicitado por parte de la barriada, además de la redistribución del ya existente, como unas jardineras prefabricadas con hormigón que en su día se apartaron para ocupar el menor sitio posible y que nunca se ha procedido a su retirada definitiva.

Otras de las tareas que se han ejecutado han tenido que ver con la limpieza de la parcela situada entre la barriada y la Avenida Reyes Católicos, junto a la escalera que comunica con esta vía, que presentaba un mal estado de conservación, con presencia de vegetación, escombros y residuos. También se ha solventado el talud de tierras detrás del Polideportivo Díaz Flor, que estaba en mal estado de conservación, con vegetación espontánea y descuidada que originaba la caída de tierras y residuos al acerado situado en su nivel inferior.

Por último la reforma más importante y vistosa se ha llevado a cabo en la pista deportiva. Como se puede observar en las imágenes, se ha reparado el vallado perimetral de la pista deportiva de la barriada, que presentaba múltiples deficiencias, como fijaciones sueltas, paneles de vallado rotos o seccionados y postes deformados por colisiones con vehículos. También se encontraban en mal estado de conservación la pintura de los apoyos isquiáticos instalados tras la pista.

Además, el perímetro de la pista necesitaba elementos para evitar la invasión de vehículos sobre el acerado, por motivos de estacionamiento indebido o por accidente, que finalmente acaban afectando al vallado perimetral de la pista. Por ello, se han instalado bolardos en la acera situada entre la pista y la vía pública. Por último, viendo el mal estado general de la pintura en el campo, se ha renovado, tanto la de las líneas de la pista como las del color de fondo.

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