Así son los trabajos para conectar Ceuta y la península por un cable submarino

CONEXIÓN ENERGÉTICA

Barco cablero Giulio Verne, que ha transportado a Ceuta el primer cable submarino
Barco cablero Giulio Verne, que ha transportado a Ceuta el primer cable submarino | Cedida

Ceuta/ Ceuta está cada vez más cerca de integrarse plenamente en el sistema eléctrico peninsular gracias a las obras de interconexión que están en marcha mediante dos cables submarino. Este proyecto, en el que el Gobierno nacional ha invertido 221 millones de euros y cuyas obras están a cargo de Red Eléctrica, permitirá mejorar la fiabilidad del suministro eléctrico, aumentar la penetración de energías renovables y reducir las emisiones contaminantes, además de favorecer el desarrollo económico y social del Campo de Gibraltar y de la propia ciudad autónoma.

El tendido del cable comenzó el pasado 26 de agosto desde la costa peninsular, frente a La Línea de Concepción, y avanza ya por el fondo marino en un recorrido de 58 kilómetros hasta alcanzar la costa ceutí. Se trata de una obra de gran complejidad técnica que requiere de equipos especializados y tecnología de última generación. Para ello, Red Eléctrica ha contado con el buque cablero Giulio Verne, operado por la empresa Prysmian, uno de los pocos barcos en el mundo capaces de instalar cables submarinos a profundidades de hasta 1.600 metros y con una capacidad de carrete de 7.000 toneladas.

La instalación y protección del cable a profundidades de hasta 900 metros se ha realizado con especial atención al cuidado del fondo marino y su biodiversidad. La compañía ha empleado equipos de tendido avanzados y maquinaria específica para el soterramiento posterior, asegurando la estabilidad del cable y su compatibilidad con otras actividades marinas, como la acuicultura y la pesca.

Una vez finalizado el primer circuito en Ceuta, se procederá al tendido del segundo circuito, que se espera concluir a lo largo del otoño. Paralelamente, los trabajos en la nueva subestación de Virgen de África, la primera de transporte eléctrico en Ceuta, están previstos para finalizar en septiembre. En la península, la construcción del nuevo parque de transformación adyacente a la subestación existente de Algeciras 220 kV se completará en octubre. Con la finalización de los trazados terrestres en ambos extremos, la infraestructura debería estar plenamente operativa antes de concluir el año 2025.

La interconexión eléctrica entre Ceuta y la península se compone de un doble circuito de 132 kilovatios, con una longitud total aproximada de 68,9 kilómetros, completamente subterráneos o submarinos. El diseño ha tenido en cuenta criterios de sostenibilidad y respeto ambiental, minimizando impactos sobre el paisaje y el ecosistema marino. La transición del cable de tierra a mar se ha realizado mediante perforación horizontal dirigida, una técnica que permite construir un pequeño túnel desde la costa hasta varios cientos de metros mar adentro, evitando cualquier afección a playas, zonas de baño o especies protegidas.

En tierra, los cables discurren soterrados desde la costa hasta la subestación Virgen de África 132 kV en Ceuta y hasta el nuevo parque de transformación Algeciras 132 kV, reutilizando viales e infraestructuras existentes para reducir el impacto visual y ambiental. Ambas subestaciones cuentan con tecnología GIS, compacta e integrada en edificios, optimizando el uso del espacio y facilitando su mantenimiento.

Durante el tendido submarino, el buque cablero ha empleado dispositivos de monitorización que garantizan la correcta colocación del cable y la protección de la fauna y flora marinas. Además, se han implementado técnicas de protección que minimizan los riesgos de agresiones externas y aseguran la convivencia de la infraestructura con la actividad pesquera y humana en la zona.

El proyecto

El proyecto ha seguido un camino de planificación y ejecución que, según explicó el secretario de Estado de Energía, Joan Groizard, este lunes durante su visita a Ceuta, ha “ido como la seda” gracias a la coordinación técnica y administrativa de todas las partes implicadas. “Cuando dimos con la tecla, el buen trabajo técnico, junto con el conjunto de las administraciones, permitió que todo fluyera”, destacó.

La primera fase se remonta a 2022, con la exposición pública del proyecto. Esta instancia permitió a agentes sociales, ciudadanos y entidades presentar observaciones y sugerencias, integrando así a toda la sociedad civil en el proceso de planificación de la infraestructura. En junio de 2023, el Ministerio concedió la declaración de impacto ambiental favorable, un paso clave para garantizar que el proyecto se desarrollara respetando los criterios de sostenibilidad y protección del entorno marino y terrestre. Un año más tarde, en junio de 2024, la Secretaría de Estado de Energía otorgó la autorización administrativa previa, consolidando los aspectos técnicos y normativos necesarios para avanzar hacia la construcción.

Solo unos meses después, en noviembre de 2024, el Consejo de Ministros aprobó la autorización de construcción junto con la declaración de utilidad pública, un instrumento esencial para la ejecución efectiva del proyecto. Esta declaración no solo confirma la relevancia estratégica de la interconexión, sino que también permite agilizar los trabajos en el terreno y coordinar las distintas administraciones implicadas.

“Una de las grandes dificultades de proyectos de esta magnitud es el plazo”, señaló el secretario de Estado. Desde la exposición pública de 2022, la programación prevista de los trabajos contemplaba la finalización de la infraestructura para finales de 2025. “Que un proyecto de esta envergadura llegue a su ejecución en tiempo habla del buen hacer técnico de Red Eléctrica y de sus proveedores”, aseguró, subrayando la complejidad de instalar un cable submarino de decenas de kilómetros sobre el fondo marino.

El proyecto ha contado con la colaboración de administraciones, organizaciones y ciudadanos, que han contribuido a definir un trazado óptimo desde los puntos de vista técnico, ambiental y social. Asimismo, se han llevado a cabo estudios detallados de campo y consultas con autoridades locales para garantizar la máxima protección de especies, vegetación y hábitats marinos.

La interconexión no solo permitirá una mayor fiabilidad del suministro eléctrico en Ceuta, sino que también favorecerá un modelo energético más sostenible, al facilitar la integración de energías renovables provenientes de la península. Esto contribuirá a reducir costes de producción eléctrica y permitirá que la región del Campo de Gibraltar pueda atender nuevas demandas energéticas esenciales para su desarrollo económico y social.

En cuanto a la operación y mantenimiento, Red Eléctrica cuenta con amplia experiencia en infraestructuras de este tipo. La compañía asegura que la interconexión estará equipada para soportar condiciones extremas y ofrecer un suministro estable y seguro, adaptado a las necesidades futuras de Ceuta y de la península.

Además, el proyecto representa un paso decisivo hacia la transición energética justa y sostenible, ya que se integra con otros sistemas eléctricos y permite planificar la incorporación progresiva de energías limpias. La combinación de soterramiento terrestre y tendido submarino asegura que la instalación no afecte al paisaje urbano ni a la actividad económica local, mientras se respeta el medio ambiente marino y terrestre.

Red Eléctrica destaca que la ejecución del proyecto se ha realizado bajo criterios de máxima seguridad y eficiencia, contando con la última tecnología para la instalación de cables y la gestión de subestaciones. Todo el trazado ha sido planificado para garantizar la fiabilidad del suministro y la durabilidad de la infraestructura, con planes de mantenimiento preventivo y monitoreo continuo de su estado.

También te puede interesar

Lo último

stats