García: “Quienes establecen las normas no han pisado un terreno de juego en su vida”

El entrenador de la UD Las Palmas, Luis García, compareció visiblemente serio pero orgulloso en la rueda de prensa posterior al empate a uno frente a la AD Ceuta, disputado este domingo a las 21.00 horas en el estadio Alfonso Murube. El técnico centró buena parte de su intervención en las dificultades sufridas por su equipo durante el desplazamiento y en la falta de igualdad de condiciones con las que, a su juicio, se afrontó el encuentro.

García relató con detalle un viaje “muy duro y estresante” marcado por retrasos, cancelaciones y horas de espera, circunstancias que, según explicó, condicionaron tanto la preparación como el rendimiento del equipo. Pese a todo, subrayó que sus jugadores “se dejaron la vida” y defendió que el punto logrado puede resultar valioso en el contexto de la competición.

El entrenador explicó que varios futbolistas pasaron hasta ocho horas en el aeropuerto el día previo, con vuelos cancelados y regreso a casa en plena noche, lo que impidió un descanso adecuado. A ello se sumó un nuevo retraso en la salida del domingo por problemas logísticos, que provocó que la expedición llegara a Ceuta con el tiempo justo, comiendo a media tarde y sin apenas margen para la recuperación física.

En este sentido, el entrenador lamentó que no se tuviera en cuenta el impacto del viaje no solo en los jugadores, sino también en el equipo arbitral, al que se le exige un alto nivel pese a afrontar un desplazamiento “en condiciones extremas”. “No hay igualdad cuando se juega así”, afirmó, al tiempo que criticó que quienes establecen las normas “no han pisado un terreno de juego”.

García insistió en que no entraba a valorar si el resultado fue justo o no, pero sí quiso remarcar su “orgullo absoluto” por el compromiso del grupo. Además, agradeció públicamente a la AD Ceuta su comprensión y predisposición para empatizar con la situación vivida por el conjunto canario, deseándole “lo mejor” tanto al club como a su cuerpo técnico.

Según explicó, su equipo generó varias situaciones claras para ampliar la ventaja y llegó a tener opciones de ponerse 0-2, pero la falta de acierto mantuvo el marcador ajustado. A partir del minuto 60, reconoció que el desgaste físico influyó en la toma de decisiones, algo determinante en el tramo final, cuando el Ceuta, empujado por su público, logró el empate con un gol de mérito.

El entrenador cerró su comparecencia destacando que se siente “un gran afortunado” por dirigir a este grupo, al que definió como ambicioso y con hambre competitiva. Sin aventurar qué ocurrirá al final del curso, aseguró que la UD Las Palmas luchará “hasta el último día y hasta la última gota de sudor”, un compromiso que, según afirmó, es motivo suficiente para que un entrenador se sienta plenamente satisfecho.