Multas en pesetas y normativa del siglo pasado

La Ordenanza de Circulación de Ceuta lleva 26 años sin actualizarse: multas en pesetas y normativa del siglo pasado

Una regulación de 1998 sigue rigiendo el tráfico en la ciudad autónoma mientras ignora patinetes eléctricos, vehículos sostenibles y la realidad de la movilidad actual

Ceuta — Mientras las ciudades españolas avanzan hacia modelos de movilidad sostenible y adaptan sus normativas a los nuevos tiempos, Ceuta sigue rigiéndose por una Ordenanza Municipal de Circulación aprobada el 11 de septiembre de 1998. Con más de 26 años de antigüedad, este texto legal presenta serias deficiencias que evidencian la urgente necesidad de una profunda renovación.

Multas en pesetas: el símbolo de lo obsoleto

El ejemplo más llamativo de la desactualización de esta ordenanza es que las sanciones siguen expresadas en pesetas. Las multas contemplan cuantías como 15.000 pesetas, una moneda que dejó de circular hace más de dos décadas. Esta anomalía no solo genera confusión administrativa, sino que refleja la falta de revisión del texto normativo desde su aprobación original.

Una normativa anclada en el siglo XX

La ordenanza se fundamenta en el Real Decreto Legislativo 339/1990 sobre Tráfico, Circulación de Vehículos a Motor y Seguridad Vial, una norma que ha sido sustituida y modificada sustancialmente en las últimas décadas. Esta base legal obsoleta genera inseguridad jurídica y dificulta la aplicación efectiva de las normas de circulación adaptadas a la legislación vigente.

Entre las referencias anticuadas destacan las regulaciones sobre placas de identificación de ciclomotores y requisitos técnicos que ya no se corresponden con los estándares actuales de la Dirección General de Tráfico.

Los grandes ausentes: la movilidad del siglo XXI

La Ordenanza de 1998 ignora por completo fenómenos que han transformado radicalmente la movilidad urbana en los últimos años:

Vehículos de Movilidad Personal (VMP): Patinetes eléctricos, hoverboards y otros dispositivos que se han convertido en parte habitual del paisaje urbano no tienen cabida en esta normativa. Sin regulación específica sobre dónde pueden circular, velocidades máximas o requisitos de seguridad, se genera un vacío legal preocupante.

Vehículos eléctricos: La revolución de la movilidad eléctrica no existía en 1998. La ordenanza no contempla aspectos como zonas de recarga, plazas de aparcamiento reservadas para vehículos eléctricos o incentivos para su uso, elementos que otras ciudades ya han incorporado a sus normativas.

Movilidad compartida: Los servicios de carsharing, motosharing y bicicletas compartidas operan en un limbo normativo. La ordenanza no regula aspectos como las zonas de estacionamiento de estos vehículos o las condiciones de operación de estas plataformas.

Zonas de Bajas Emisiones (ZBE): Con la obligación legal de que los municipios de más de 50.000 habitantes establezcan ZBE, Ceuta necesita un marco normativo actualizado que permita implementar estas medidas de calidad del aire.

Tecnología y sistemas de gestión modernos

La ordenanza tampoco contempla los avances tecnológicos en gestión del tráfico:

Sistemas inteligentes de regulación semafórica

Cámaras de control de acceso a zonas restringidas

Aplicaciones móviles de información de tráfico en tiempo real

Sistemas de pago digital de estacionamiento

Sensores de ocupación de plazas de aparcamiento

Seguridad vial: nuevos estándares ignorados

Las políticas de seguridad vial han evolucionado significativamente desde 1998. Conceptos como la “Visión Cero” de víctimas mortales, la priorización peatonal, la protección especial de ciclistas o las zonas 30 no están reflejados en una ordenanza que responde a paradigmas de movilidad superados.

El impacto en la vida cotidiana

Esta desactualización no es solo una cuestión técnica o administrativa. Afecta directamente a la vida de los ceutíes:

Ciudadanos: Desconocen qué normas se aplican realmente a nuevos medios de transporte

Policía Local: Carece de herramientas normativas claras para regular situaciones cotidianas

Empresas de movilidad: Operan sin un marco legal definido

Gestión municipal: Dificulta la implementación de políticas modernas de movilidad sostenible

Otras ciudades ya actuaron

Mientras Ceuta mantiene su ordenanza de 1998, ciudades como Madrid, Barcelona, Valencia o Málaga han actualizado recientemente sus normativas de movilidad para adaptarlas a los retos del siglo XXI. Estas ciudades han incorporado regulaciones sobre VMP, vehículos eléctricos, zonas de bajas emisiones y nuevos modelos de movilidad compartida.

La urgencia de actuar

Expertos en movilidad urbana consultados coinciden en que la actualización de la Ordenanza de Circulación de Ceuta no puede demorarse más. No se trata solo de modernizar un texto legal, sino de dotar a la ciudad de las herramientas necesarias para gestionar los retos presentes y futuros de la movilidad urbana.

La renovación debería abordar:

Adaptación legal completa a la normativa estatal vigente

Regulación de nuevos vehículos (VMP, eléctricos, etc.)

Implementación de zonas de bajas emisiones

Movilidad sostenible y activa (peatones, ciclistas)

Integración tecnológica en la gestión del tráfico

Movilidad compartida y nuevos modelos de transporte

Actualización del régimen sancionador (en euros y adaptado a la realidad actual)

¿Cuándo se actuará?

Hasta el momento, no se ha anunciado ningún proceso de revisión integral de la Ordenanza Municipal de Circulación. Mientras tanto, Ceuta sigue regulando su tráfico con normas de hace más de un cuarto de siglo, en un mundo que ha cambiado radicalmente.

La pregunta que muchos ceutíes se hacen es: ¿cuánto tiempo más tendremos que esperar para tener una normativa de circulación del siglo XXI?