“Ceuta no se construye en el miedo, en la dependencia, la traición y la mentira”

La consejera de Hacienda, Kissy Chandiramani, protagonizó este lunes uno de los momentos más tensos del debate de aprobación inicial de los Presupuestos de la Ciudad para 2026 al responder con firmeza a las acusaciones vertidas por el portavoz de Vox, Juan Sergio Redondo. Chandiramani criticó los calificativos utilizados por el grupo de la oposición y afirmó que “Ceuta no se construye en el miedo, en la dependencia, la traición y la mentira”, señalando directamente a Vox como responsable de fomentar un clima de confrontación política y social.

La consejera acusó al partido de ultraderecha de incurrir en “traición” hacia la ciudad al poner en duda la españolidad de ceutíes que, según dijo, “rezan o se llaman como yo”, incluyendo a miembros del propio Gobierno local. “Esa es la verdadera deslealtad con Ceuta”, sostuvo.

En materia económica, Chandiramani rebatió las cifras aportadas por Redondo, recordando que muchas estadísticas citadas por Vox están sujetas a cautelas metodológicas y no reflejan la realidad concreta del territorio. En su defensa de la gestión del Ejecutivo, destacó que la afiliación a la Seguridad Social superaba los 2.000 trabajadores antes del cierre de la frontera de octubre de 2019, y aseguró que las partidas destinadas a políticas sociales y atención a menores se ejecutan “con total transparencia y conforme a la ley”.

La responsable de Hacienda reivindicó asimismo la transparencia de los Presupuestos de 2026, subrayando que “cada gasto, cada subvención y cada contrato” están registrados y disponibles para consulta pública. Reivindicó que la acción política del Gobierno se basa en la “lealtad institucional y el consenso”, y puso en valor avances como la conexión eléctrica con la Península y la cesión de suelo por parte del Ministerio de Defensa, que calificó de inversiones estratégicas para el futuro de la ciudad.

Chandiramani cerró su intervención acusando a Vox de promover un discurso “racista” que, a su juicio, divide a la sociedad ceutí y enfrenta a sus vecinos, reprochando al partido que utilice el debate presupuestario “como plataforma para sembrar la discordia en lugar de contribuir al progreso de Ceuta”.