Chandiramani tacha de “inviables” las enmiendas del PSOE al presupuesto

La consejera de Hacienda, Kissy Chandiramani, rechazó este viernes las enmiendas presentadas por el PSOE al Presupuesto de la Ciudad para 2026 al considerarlas técnicamente inviables y financiadas a costa de comprometer servicios esenciales, en una respuesta directa a las acusaciones de despilfarro formuladas por los socialistas durante el pleno, en la que defendió la coherencia del proyecto de cuentas para el próximo año y cuestionó el planteamiento económico de la oposición.

Chandiramani comenzó desmontando la premisa de que los acuerdos plenarios obligan automáticamente a dotar partidas presupuestarias. Según expuso, un acuerdo político no sustituye a los elementos básicos de la técnica de cuentas, como la memoria económica, la definición competencial, la programación plurianual o la capacidad real de ejecución. Sostuvo que “un presupuesto responsable no se construye por reiteración política, sino cuando existen proyectos maduros, competencias claras y cobertura financiera sostenible”.

La consejera incidió en que varias de las enmiendas del PSOE se sitúan fuera del ámbito competencial de la Ciudad, especialmente en materia sanitaria. Señaló que propuestas como la implantación estructural de enfermería escolar, cribados poblacionales organizados o ampliaciones de cartera sanitaria corresponden al Estado y no pueden asumirse como políticas municipales sin un marco jurídico previo ni convenios con los organismos competentes.

Uno de los puntos centrales de la respuesta fue la financiación planteada por los socialistas. Chandiramani advirtió de que las enmiendas se sostienen mediante recortes en partidas que garantizan el funcionamiento ordinario de la ciudad, como agua, alumbrado, telefonía, mantenimiento o servicios urbanos, así como en instrumentos clave de gestión como PROCESA, OBIMACE, Amgevicesa o los servicios tributarios. A su juicio, esta fórmula pone en riesgo la continuidad de servicios básicos y la ejecución de contratos en vigor.

En relación con la vivienda, la consejera cuestionó el incremento propuesto hasta los 12 millones de euros en un solo ejercicio. Explicó que no se acompaña de programación plurianual, cronograma, disponibilidad de suelo ni proyectos listos para licitar, lo que, según afirmó, hace inviable absorber ese volumen de crédito en un año sin generar desequilibrios financieros.

Sobre las propuestas sociales, Chandiramani reconoció que algunas iniciativas pueden ser razonables, pero reprochó que se presenten con importes elevados sin memoria de gestión, ratios de cobertura ni refuerzo administrativo para su tramitación y control. 

La consejera también puso el foco en lo que calificó como inconsistencias graves en la financiación, al citar minoraciones apoyadas en partidas desaparecidas o entidades inexistentes, así como la eliminación de direcciones generales como supuesta fuente de recursos, una decisión que, subrayó, afecta a la estructura organizativa y no puede utilizarse como simple ajuste presupuestario.

En su valoración global, Chandiramani sostuvo que el paquete de enmiendas del PSOE carece de viabilidad técnica, presenta riesgos competenciales y se apoya en una financiación que compromete servicios esenciales y la capacidad operativa de la Ciudad, lo que, según defendió, impide su incorporación responsable al Presupuesto de 2026.