La confesión de la ex de Ábalos y la caída en desgracia de dos socialistas ceutíes

La entrada en prisión de José Luis Ábalos es la última noticia en el plano judicial para un Gobierno que está teniendo, en ese sentido, su particular 'annus horribilis'. Durante este 2025, los dos últimos secretarios de Organización del PSOE han ingresado en la cárcel. Ábalos se ha convertido, también, en el quinto ministro de la democracia (tras su compañero de partido José Barrionuevo y los 'populares' Rodrigo Rato, Jaume Matas y Eduardo Zaplana) en ingresar en prisión, bien de modo provisional o bien para cumplir alguna condena. Y en las últimas fechas, también, aparece la controvertida gestión del caso de Francisco Salazar: en primer momento, llamado a ser el secretario de Organización tras la dimisión de Santos Cerdán (una semana antes de que el navarro fuera a la cárcel), pero luego acusado de acosar a varias mujeres del PSOE, en unos hechos de los que supuestamente sería conocedora la Ejecutiva nacional de los socialistas.

Este fin de semana, el diario El Mundo se ha hecho eco de la caída de las mujeres que apoyaron a Pedro Sánchez desde el primer momento hasta hace, prácticamente, semanas. Y de los enfrentamientos internos de estas con gente como Cerdán o Ábalos, que les supuso en muchos casos la caída en desgracia. Firma la información Ángeles Escrivá, una de las periodistas más sólidas en cuanto a cuestiones de Interior y seguridad de nuestro país.

En la información, además, se establece una confidencia y un momento como detonante de la crisis interna del 'feminismo de Ferraz'. Aquel en que María Luisa Perles, ex mujer de Ábalos, se desahoga con otras dos mujeres, a las que confiesa las infidelidades de su marido y su afición a la prostitución. Sus confidentes son la vicesecretaria general, Adriana Lastra, y la responsable por entonces de Comunicación, la ceutí María del Rosario 'Marítcha' Ruiz Mateos.Estas deciden alertar a Carmen Calvo, entonces vicepresidenta del Ejecutivo. Esta advierte al presidente del Gobierno y secretario general del PSOE, Pedro Sánchez. Un año después, Ábalos ha dejado de ser ministro de Transportes y Calvo la vicepresidencia del Gobierno. Pero no solo han sido cesados estos dos cargos.

Santos Cerdán es el hombre a quien Sánchez confía el 'número dos' del partido tras la caída definitiva de Ábalos. Y este no oculta un enfrentamiento abierto con Lastra y Ruiz Mateos, hasta el punto de llegar a lo personal. La asturiana es ninguneada, según la información, impidiéndosele entrar en reuniones del partido en las que antes era habitual. Está embarazada, por lo que decide dimitir y abandonar la política en esos momentos. Sánchez le llegó a ofrecer el Ministerio de Sanidad, que no acepta y la nombra delegada del Gobierno en el Principado. La suerte de Ruiz Mateos es parecida: apenas una semana después de Lastra, ella sale de la sede de Ferraz. En principio, a un lugar emblemático como es el Hipódromo de la Zarzuela. Pero a los seis meses es relevada también de ese cargo: le sustituye Ernesto Gascó, que ocupó varios cargos en el organigrama de los socialistas vascos, que llega también con segunda de a bordo. Se trata, en este caso, de Judith Martínez, la esposa de Oscar Aizpuren (UPN), amigo de Cerdán desde la época en que coincidieron en el Parlamento navarro.

Ruiz Mateos, una de las primeras personas que apoyó a Sánchez tanto en el Congreso Federal de 2014 como en las primarias de 2017 (el de la famosa foto del Peugeot) es hija de Salvadora, quien fuera delegada del Gobierno entre 2018 y 2022. Mateos también cae aquel año, de una manera poco elegante, según el relato de Ángeles Escrivá: "un periodista la llama para comentarle su cese mientras está recibiendo una sesión de quimioterapia". Tras este cese, el enfrentamiento de Cerdán con Maritcha y Lastra. "Iba a muerte a por ellas", confiesa algún mando de los socialistas locales tras un encuentro con el entonces todopoderoso secretario de Organización.

A día de hoy, Mateos vive retirada de la actividad política. Condenada a doce años de inhabilitación y pérdida de honores por su gestión de la repatriación de los menores transfronterizos en 2021, acabó así una trayectoria política que la había llevado a ser consejera de Gobernación, diputada autonómica y candidata a las primarias. Su hija también está por completo desvinculada de la vida política, dedicándose en estos momentos a la comunicación corporativa en el ámbito de la empresa privada.