Continúa la tragedia: aparecen dos nuevos cadáveres en la misma mañana
INMIGRACIÓN
Dos nuevos cadáveres han aparecido esta mañana, uno la zona del Recinto Sur y el otro en la bahía norte, a unos 200 metros de la bocana. Uno de ellos ha aparecido en la mañana de este martes frente a las costas del Recinto Sur. Un lugar emblemático, que ofrece siempre vistas de postal, pero cuya contemplación invita a reflexionar sobre los dos países, los dos mundos, que separan apenas unos metros de agua

Treinta y ocho cuerpos sin vida; treinta y ocho cadáveres. Treinta y ocho proyectos de vida, segados de una manera cruel. Dos cifra más; otras dos vidas jóvenes que acaban antes de tiempo en las costas de Ceuta. Uno de ellos ha aparecido en la mañana de este martes frente a las costas del Recinto Sur. Un lugar emblemático, que ofrece siempre vistas de postal, pero cuya contemplación invita a reflexionar sobre los dos países, los dos mundos, que separan apenas unos metros de agua. A este lado, un occidente y un país con una sanidad y educación -entre otros- renqueantes, pero existentes. Al otro lado, un país cuyas calles arden por el hartazgo de décadas de dureza social. A este lado, el debate sobre las pensiones. Al otro, la esperanza de un sueldo decente. Mientras que el segundo cadáver, ha aparecido en las últimas horas, en la bahía norte, concretamente a 200 metros de la bocana. Según fuentes oficiales consultadas, se trata de un joven magrebí, con ropa de calle y se encontraba apoyado en una tabla.
Podemos seguir así hasta la noche de los tiempos. Da igual, salvo que nos centremos en la noticia. Treinta y ocho hombres jóvenes, algunos de ellos con la mayoría de edad recién estrenada, cuya vida se ha tragado el elemento más bello y traicionero de la naturaleza: el mar. Del de esta mañana no se sabe aún ni la edad; si que llevaba varios días muerto e iba con traje de neopreno. Casi que da igual. Nos hemos acostumbrado a ello, y es cierto que a la hora de repartir culpas ni usted ni yo tenemos responsabilidad. Pero tengamos presente que hay treinta y ocho hombres muertos por soñar con tener nuestros quebrantos.
Y que la cifra, por si sola, es fría. Treinta y ocho. Pero este año 2025 va a pasar a la historia, entre otros motivos, por batir un tétrico récord. Nunca se han recuperado tantos cadáveres en un año en la costa de Ceuta como en este 2025. Y aún queda el invierno, tienen que venir los temporales. Ponernos a pronosticar cuantas muertes más nos devolverá el mar es hasta de mal gusto, pero no sería descabellado que a 31 de diciembre hayamos escrito esta noticia en torno al medio centenar de veces.
En mañanas como las de hoy, en la que el verano no se termina de ir y el otoño no termina de quedarse, la Bahía Sur de Ceuta ofrece unas vistas, como decíamos, envidiables. Días de cielos despejados, en los que es posible ver toda la costa norte de Marruecos. Los amaneceres son impresionantes. Pero, en días como hoy, es necesario y recomendable una cosa, antes de seguir con las rutinas a la que aspiraban hombres como el encontrado esta mañana. Seamos o no creyentes, recemos a quien lo hagamos, agradecer haber nacido quinientos metros más al norte que al sur.