Luis Quintana, y la esperanza de la paz en Tierra Santa
PALESTINA
El franciscano Luis Quintana, de la Orden del Santo Sepulcro de Jerusalén, ve en el actual momento "una esperanza para la paz" entre Israel y Palestin
Se encuentra estos días en Ceuta Luis Quintana, perteneciente a la Congregación Franciscana de Tierra Santa. Al margen de una exposición inaugurada en San Antonio, este miércoles fue el turno para presentar su labor en la Iglesia de África.
Los Custodios de Tierra Santa son, por tanto, testigos de excepción para calibrar el avance de la situación en Oriente Medio. “Hemos visto imágenes terribles, pero si es cierto que desde la firma de los acuerdos de paz, parece que el ambiente empieza a tranquilizarse” en Israel. “Es hora ya de que esas personas, que llevan toda la vida peleándose, puedan alcanzar al fin la paz. Hemos visto imágenes terribles, de matanzas de Israel a Palestina y de Hamás a los palestinos, pero hay que creer en la paz”, decía a El Pueblo de Ceuta minutos antes de la presentación en el templo patronal.
Desde la Congregación franciscana se han vivido estos años "con incertidumbre y miedo, desde aquel terrible 7 de octubre de 2022 hasta ahora". El camino hacia la paz "no va a ser fácil, pero se está recorriendo, y la gente tiene ganas de vivir con tranquilidad. Es lo que he palpado en mi última visita a Cisjordania, y también en mi reunión con el padre Guillermo, conocido como el 'cura de Gaza'", declaraba el religioso a El Pueblo de Ceuta.
Durante estos años, la entidad - Premio Convivencia en 2017- "ha vivido momentos malos, pero hemos hecho lo que hemos podido. Por ejemplo, sacar dos aviones con niños heridos para ser operados en Italia, mediar para que entrase y saliese ayuda humanitaria de Gaza"... Fundamental el papel de gente "como el cardenal Pizzaballa". Aquel hombre que se ofreció en 2022 a canjearse por los rehenes israelíes a fin de evitar lo que vino después. "Puedo asegurar que no iba, desde luego, de farol", dice el franciscano.
Pese a ello "Jerusalén sigue siendo una ciudad especial, que engancha y enamora.. Ha sido destruida once veces, tantas como reconstruida. Es posible escuchar la llamada a la oración de los rabinos y los imanes el viernes y el domingo que suenen las campanas de Jerusalén, tanto las ortodoxas como las católicas. En ese sentido, y con el hinduísmo, Ceuta me recuerda bastante a esa ciudad. Por sus calles se puede caminar con tranquilidad desde el pasado mes de septiembre, y ya empiezan a venir peregrinos en cantidades que hasta hace unos meses no lo hacían".
Faltan "que se animen los peregrinos europeos, porque hay medios de comunicación que no nos han hecho un favor. En cualquier caso, siempre va a merecer la pena visitar Jerusalén".