Los médicos se levantan de la reunión con la ministra y siguen adelante con la huelga
Médicos
Los representantes del colectivo se marcharon del encuentro mantenido este miércoles con el Ministerio de Sanidad ante la negativa de crear el estatuto marco específico que reclaman. El próximo paro está previsto para el 14 y 15 de enero
La Confederación Estatal de Sindicatos Médicos (CESM) y el Sindicato Médico Andaluz (SMA) abandonaron este miércoles por la tarde la mesa de negociación con el Ministerio de Sanidad tras un desacuerdo con el departamento que dirige la ministra Mónica García, según informa el diario El País. Ambas organizaciones decidieron desmarcarse del convenio marco para el conjunto del personal sanitario que el ministerio acordó esta semana con los sindicatos presentes en el ámbito oficial de negociación. Las protestas, por tanto, siguen en pie, con una huelga prevista para los días 14 y 15 de enero.
El pacto, alcanzado el lunes, cuenta con el respaldo de SATSE-FSES, CC OO, UGT, CSIF y CIG-Saúde, pero no ha sido suscrito por CESM y SMA, que mantienen su rechazo al considerar que no responde a las demandas específicas del colectivo médico. El principal motivo del desencuentro es la negativa del ministerio a crear un estatuto propio para médicos y facultativos, una reivindicación histórica de estas centrales sindicales.
El enfrentamiento se produjo cuando el Ministerio de Sanidad descartó abrir una mesa de negociación paralela a la ya existente, una vía que permitiría abordar acuerdos exclusivos para los profesionales médicos. Desde el departamento de Mónica García defienden que el único espacio “legítimo y legalmente establecido” para canalizar las reivindicaciones laborales es el ámbito de negociación del Sistema Nacional de Salud, del que la propia CESM forma parte. En este sentido, el ministerio lamentó que ambas organizaciones opten por mantener una estrategia de presión centrada en exigir un foro específico y diferenciado.
Pese a que el acuerdo alcanzado con el resto de sindicatos ha satisfecho, al menos de forma provisional, las demandas de otros colectivos sanitarios, la negociación con los representantes de médicos y facultativos continúa bloqueada. Por el momento, CESM y SMA no han aclarado si este nuevo desencuentro derivará en la convocatoria de nuevas movilizaciones o jornadas de huelga.
Los sindicatos médicos insisten en que la profesión presenta particularidades en aspectos como la formación, la responsabilidad asistencial o las condiciones de trabajo, que justifican un marco regulador propio y diferenciado del resto del personal sanitario. Esta posición también es compartida por la Agrupación Profesional por un Estatuto Médico y Facultativo (APEMYF), una plataforma integrada por 16 sindicatos y asociaciones médicas de todo el país, creada para reforzar la presión negociadora.
APEMYF mantiene, por ahora, su calendario de movilizaciones, incluida una huelga convocada para los días 14 y 15 de enero. Mientras tanto, el Ministerio de Sanidad defiende el convenio marco como un avance para el conjunto del sistema sanitario y reitera su disposición a seguir dialogando dentro de los cauces ya establecidos. La huelga nacional de cuatro días celebrada la pasada semana supuso en Ceuta la anulación de todas las cirugías programadas para los cuatro días de huelga. Con la única excepción de una intervención quirúrgica a un paciente oncológico, cuyo procedimiento siguió adelante el martes debido a su gravedad. Del resto, toda la actividad de quirófano previsto por servicios como Cirugía General, Ginecología, Traumatología, Otorrinolaringología u Oftalmología fue cancelada. Durante la semana de paro se han anulado también citas programadas en las especialidades de Urología, Cirugía General, Anestesia, Traumatología, Oftalmología, Cardiología, Digestivo, Unidad del Dolor, Neumología, Alergología u Otorrinolaringología.
Las reivindicaciones
Los médicos quieren una regulación propia de su profesión, debido a las especificidades intrínsecas en ella, y buscan negociar de manera directa con el Ministerio, para acabar con una sensación de infrarrepresentación que llevan años arrastrando. Esto se debe a que las mesas de negociación con el Gobierno las forman sindicatos de clase y de otras profesiones -como la Enfermería- con más volumen en el SNS. El colectivo médico representa apenas un 16% del conjunto del sistema.
Pero, en paralelo, suman más créditos universitarios (360 frente a los 240 de la mayoría de grados), más años de formación (12) y ostentan la responsabilidad última sobre el paciente. Esto, sumado a las particularidades de su jornada laboral. Mientras el resto del funcionariado lucha por las 35 horas semanales, los médicos llegan a sumar más de 45. Además de ser los únicos sanitarios con guardias de 24 horas obligatorias, según han ido informando sus representantes durante estos días de movilizaciones. Para más inri, las horas de guardia no les computan como tiempo trabajado para la jubilación; además, les son retribuidas con una menor cuantía que las horas ordinarias.
Piden jornadas ordinarias de 35 horas, al igual que exige el resto de los trabajadores de la administración. En la actualidad, ascienden a 48, y el departamento de Mónica García se limita a prometerles que la reducirán a 45.
Reclaman la consideración de la medicina como profesión de riesgo, al igual que el personal de vuelo, bomberos o policías.
También reclama un estatuto específico para estos profesionales sanitarios que se encuentran actualmente dentro del Grupo A (categoría profesional A1) y que además pasen a obtener una nueva clasificación profesional A plus dentro de las categorías profesionales de la Administración; por su hecho diferencial (formación, exigencia, liderazgo, finalidad y responsabilidad).