Los hombres podrán bailar salsa y bachata en enero por mitad de precio

En los bailes latinos se habla de líderes y seguidoras. Los primeros guían la coreografía, las segundas se dejan llevar. El género tiene por momentos menos relevancia. Cada vez más mujeres se atreven con el liderazgo y también los hay que optan por seguirlas a ellas. A Jesús Villatoro poco le importa si hombre o mujer, pero necesita líderes en su academia, Bachatea 23, donde el equilibrio entre quienes dan las órdenes y quienes las acatan en el baile está descompensado por la gran cantidad de mujeres que se atreven con sus clases de salsa y bachata. Para ponerle remedio y lograr que “todos disfruten” y nadie se quede sin pareja, el bailarín y su compañera, Maribel Cáceres, han decidido ofrecer descuentos para aquellos hombres o mujeres líderes que quieran acercarse los bailes caribeños. También para las parejas que se animen a ir juntas.

“Desde hace varios años no para de crecer el volumen de mujeres. Queremos tratar de igualar para que la calidad de las clases siga siendo buena y que haya una equiparación entre líderes y seguidoras”, explica Villatoro, quien, tras años impartiendo bachata, este curso ha incorporado a su escuela la modalidad de la salsa. Para ambas disciplinas ha diseñado un intensivo que se desarrollará durante el primer mes del año. Todos los hombres o mujeres -y parejas- que deseen liderar tendrán un descuento del 50% para el mismo. Además, los abonados de la AD Ceuta podrán acudir gratuitamente. Las rebajas están disponibles para todos los grupos en enero. La academia cuenta con un Nivel 1 de salsa y de bachata y un Nivel 2 solo de la segunda. Villatoro y Cáceres pretenden ampliar un grupo más en cada disciplina el próximo año: dotarlas de Grupo 0.

La idea es que el alumnado del curso intensivo de enero se incorpore a los grupos 0 de uno u otro baile. El intensivo de bachata se impartirá cada martes y jueves de 20:00 a 21:00 horas. El de salsa, los miércoles de 18:00 a 19:00 horas. “El intensivo es justo para aquellas personas que dicen que no saben bailar o no tienen ritmo, para quienes no han bailado nunca. Cuando se incorporan en otros meses, cuando los grupos tienen ya su rutina y un nivel, es cuando suelen irse porque no creen que puedan adaptarse. Justo eso es lo que vamos a hacer ahora. Dar un nivel muy básico, desde cero, para enseñarlo todo. El 99 por ciento de las personas se va a casa diciendo: ‘Pues me ha salido el paso’. Es el momento perfecto”, asegura el profesor. Estos cursos intensivos suelen organizarlos tanto en enero como en septiembre, al inicio del curso. “Son los momentos ideales para apuntarse y quitarse ese miedo a probar”.

Villatoro explica que la necesidad de líderes radica en que son las mujeres las que suelen atreverse con el baile, pero sin un equilibrio les es difícil lograr que todo su alumnado participe por igual y disfrute. “El líder, el que lleve la dinámica de la coreografía, no tiene por qué ser el hombre. La mujer también puede liderar, y el hombre ser seguido, aunque por norma general es al revés”, aclara. El ceutí anima a quienes tengan curiosidad a contactar con su academia, a través de sus redes sociales, @bachatea23, o el número de teléfono 618 04 51 43. Asegura que las clases logran sacar a sus alumnos “de esa rutina que llevan”. “Muchos vienen a echar una horita sin pensar en nada, a pasar un buen rato en un buen ambiente”, afirma.

Además de las clases, el mundo del baile latino se extiende a los fines de semana, cuando las diferentes academias de la ciudad suelen organizar fiestas para bailar salsa y bachata, conocidas como “sociales”. “Estamos entre compañeros de la misma academia y de otras. Formamos un ambiente bastante bueno. Pones a prueba tus pasos de baile. Bailas con tus compañeros, con los profesores, y es donde más te sueltas. Donde realmente puedes mejorar. La combinación perfecta es ir a las clases y a los sociales”, apunta Villatoro. También organizan convivencias dentro y fuera de Ceuta, en las que se suceden talleres de diferentes tipos de baile durante todo el día. En ocasiones, se trasladan a Cádiz, Sevilla o Málaga.