
Ruido de moto y lágrimas de alegría para celebrar la vida
CÁNCER DE MAMA
Mañana muy emotiva la de este domingo para la familia ACMUMA. Una concentración motera ha concluído en la Plaza de África, en honor de las mujeres que han superado -y superarán- el cáncer de mama
La primera victoria de la sociedad, al menos en España, contra cualquier tipo de cáncer fue cuando la gente dejó de hablar de "una cosita" o "una enfermedad" para llamar al enemigo por su nombre. Quiere decir: no se le pierde el respeto, da el lógico miedo, pero se sabe que es batible. A veces, mirar a la montaña más alta da menos pavor cuando se da el primer paso, en la lucha siempre el primer mandoble es el más complicado. Mirar al enemigo a los ojos y pensar que no vamos a ser doblegados.
La segunda victoria está llegando poco a poco. Nuestros científicos, esos que salvan millones de vida pero ninguno reconoceríamos por la calle, están dejando cada vez más diezmado a ese monstruo del averno. Hay que resaltarlo, sobre todo, en estos días de lucha contra el cáncer de mama: más del 81% de los casos detectados a tiempo acaban en curación neta. Es decir: el cáncer de mama deja secuelas, arrastra lágrimas, aplaza sueños pero al final se queda en una sombra del pasado. No siempre es así, pero lo que antes era una sentencia de muerte, un manto de humillación, ahora es cada vez más llevadero.
No: no procede recordar hoy las estrecheces con las que trabajan nuestros médicos y enfermeras en los hospitales. No conviene añadir ni una letra más al escándalo de las mamografías en Andalucía, al menos estos días. Porque a pesar de que sean cuestiones lamentables y sonrojantes, este domingo triunfa la sonrisa. La lágrima tantas veces contenida que explota vestida de alegría en enfermas y familiares. El aplauso a la loable iniciativa de los moteros de nuestra ciudad.
Al mediodía, las campanas de la Iglesia de Nuestra Señora de África suelen reinar. Este domingo no: el ruido de un buen puñado de motos se mezcló con la llamada a la misa de mediodía. Nada que lamentar: mucho que celebrar. Los moteros, todos, con pañuelito rosa practicando el deporte que más les gustas. Ellas recibiéndoles en la Plaza de África alzando los pañuelos rosas, que se han convertido en un símbolo de esperanza y determinación.
ACMUMA celebrará este lunes su acto central. Será con la lectura de un manifiesto, la presencia de autoridades y voluntarios, a partir de las 12.00 en el Revellín. Pero este domingo las protagonistas eran ellas. Esas confidencias de sororidad y apoyo que Gema Sánchez De la Torre, que vuelve a ser el terremoto de siempre tras tocar la ansiada campana, desgranaba aguantando las lágrimas. Esa danza circular que escenificaba un nuevo domingo que celebrar entre amigas. Esos moteros reunidos con la gente de ACMUMA en un jardín de la Plaza de África.
El cáncer, el cáncer de mama que se cura cada vez más, nos ha arrebatado a todos a alguien. Nos ha dejado con el alma helada alguna vez. Y probablemente, nos tenga guardado algún giro de guión en los próximos años. Pero cada vez somos más fuertes, porque esto no va de sexos: va de la vida. Las que por desgracia no están son marcas en el muro, muescas en el revolver y nombres por los que brindar cuando, al fin, ese enemigo haya sido derrotado de manera definitiva.
Únete al canal de El Pueblo de Ceuta en WhatsApp, síguenos en Facebook, Instagram y Twitter, y ACTIVA la CAMPANA DE NOTIFICACIÓN que aparece en la parte inferior para recibir al instante las últimas noticias, alertas y exclusivas directamente en tu móvil o en tu ordenador
No hay comentarios













